Detenidos 24 integrantes, 14 de ellos españoles, de una red internacional de introducción de droga a través de Portugal

Actualizado: jueves, 7 diciembre 2006 12:34

Se les ha incautado 140 kilogramos de cocaína, tres pistolas, varios vehículos, 18.000 euros y nueve ordenadores

MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Judiciaria Portuguesa, ha detenido a 24 integrantes de una red internacional dedicada a la introducción y distribución de droga en España y Portugal en el marco de la denominada operación 'Tatis' llevada a cabo en Alicante y el país vecino.

Asimismo, la operación, en la que se han practicado un total de 12 registros domiciliarios en Alicante, Jijona, Castellón, Torrevieja, Guadalajara y Cocentaina (Alicante), se ha saldado con la incautación de 140 kilogramos de cocaína, tres pistolas, varios vehículos, cuatro balanzas de precisión, 18.000 euros y nueve ordenadores.

La red introducía la droga impregnada en ropa a través de correos captados en Portugal o bien oculta en el interior de barrotes de madera que eran transportados en camión desde este país.

Sus integrantes, 14 españoles, siete portugueses, un colombiano, un argentino y un italiano, disponían de un laboratorio en Madrid, donde un químico se encargaba de transformar y cortar la droga, así como de extraer la cocaína que venía impregnada en la ropa.

Posteriormente, se localizaron en Torrevieja y Alicante las dos personas que se encargaban de organizar y financiar los viajes, así como de recepcionar la droga procedente de diversos países latinoamericanos.

Estas personas mantenían contacto con otros miembros de la organización, residentes en Guadalajara y Alicante, con el objetivo de coordinar la introducción de importantes cantidades de cocaína oculta entre distintos tipos de mercancía comercial en contenedores procedentes de Portugal y con destino a otros países europeos en barcos mercantes.

Paralelamente, el cabecilla de la red, conocido como "Rogerio", se había encargado de establecer en Portugal la infraestructura necesaria para recepcionar los contenedores procedentes de Perú, en los que se ocultaba la cocaína.

En uno de los envíos que la organización tenía previsto realizar hacia España, fue interceptado en Lisboa un camión que transportaba un total de 62,5 kilos de cocaína ocultos en el interior de barrotes de madera.