BARCELONA, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU, Artur Mas, subrayó hoy que "ninguna ley ni ningún tribunal puede estar por encima de la voluntad del pueblo" de Cataluña, en referencia a la sentencia pendiente del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut.
En declaraciones a los medios ante la estatua de Rafael Casanova en Barcelona, señaló que la voluntad del pueblo catalán desde hace siglos es que "Catalunya avance en su capacidad de decisión, en su libertad, en su construcción nacional y en su autogobierno".
"Y eso, haya la sentencia que haya, no se debe mover", dijo Mas, que apeló al espíritu de superación que siempre ha demostrado el pueblo catalán, manteniendo a lo largo de los siglos su personalidad y avanzando como nación y como sociedad pese a las dificultades.
"Este espíritu de superación es el que no debemos perder pase lo que pase en las próximas semanas", continuó el líder de CiU.
Mas no pudo participar en la ofrenda floral porque el turno de CiU se retrasó y tuvo que marcharse para asistir al acto institucional organizado por la Presidencia de la Generalitat y el Parlament en el Parc de la Ciutadella.
En cuanto a la reacción de Cataluña ante una sentencia adversa al Estatut, Mas dijo que él ya hace tiempo que dibujó una estrategia catalana, pero opinó que no es bueno ir recordándola todos los días hasta que no haya decisión del tribunal. Si todos los partidos van hablando de respuestas, dijo, después será muy difícil llegar a una postura consensuada.
Por eso, no quiso valorar que el ex presidente de la Generalitat Pasqual Maragall apostara ayer por un nuevo referéndum tras el eventual recorte, porque, a juicio de Mas, se debe esperar a la sentencia para después organizar una reacción "enérgica, contundente, firme y a la vez serena", a través del Parlament y del Govern.
En cuanto al compromiso de ayer del presidente de la Generalitat, José Montilla, de desplegar el Estatut en toda su amplitud y liderar una respuesta catalana si el TC recorta el texto, Mas prefirió no entrar en una "guerra de declaraciones" para no enturbiar la celebración de la Diada.
De todas formas, sí dijo tener la impresión de que "se dicen muchas cosas, pero después n o se utilizan los instrumentos que cada uno tiene para llevarlas a cabo".
Para Mas, el Estatut y la crisis son los dos grandes temas que marcan la Diada este año, y aprovechó para criticar que los gobiernos no estén haciendo lo que sería necesario ante la situación económica.
En cuanto a los silbidos que se producen en la ofrenda floral cuando desfila el Govern y los partidos políticos, Mas señaló que no se puede hacer nada para evitar la libre expresión del pueblo. "Las personas que encabezamos proyectos tenemos que estar agradecidos cuando se nos aplaude y atentos cuando se nos silba", consideró.
Además, argumentó que los ciudadanos no silban el himno catalán, sino "otras cosas", y añadió que tanto los aplausos como las críticas forman parte del trabajo de los políticos.
