PAMPLONA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La sección primera de la Audiencia Provincial de Navarra ha condenado un hombre, Ion Gabriel Tirca, a cinco años de prisión por un delito de inmigración ilegal para la explotación sexual y a dos años y medio de cárcel y 2.160 euros de multa por cada uno de los tres delitos de prostitución.
En total, doce años y medio por obligar a jóvenes rumanas a prostituirse en el club Tatio de Tudela, en el Omega de Zaragoza y el Teres de Calatayud. La sentencia obliga al acusado además a pagar 18.000 euros a cada una de las tres mujeres, aunque ha sido declarado insolvente. Ion Gabriel Tirca fue absuelto de un delito continuado de inmigración ilegal, del delito de agresión y de detención ilegal.
Una testigo protegida denunció el 5 abril de 2004 ante la Guardia Civil que había viajado a España para trabajar como camarera pero, una vez en Zaragoza, el 20 de marzo de ese año el acusado, que había salido a recibirla, le pegó una bofetada y le amenazó con matar a su familia en Rumanía si se negaba a trabajar durante un año para pagarle las deudas. Tenía que entregar lo ganado, una vez descontada la manutención, alojamiento y "pase" al club Tatio. La tarde del 5 de abril se escapó y denunció los hechos ante la Guardia Civil.
La Benemérita entró en el local el día 7. A raíz de esta intervención, otras dos mujeres relataron hechos similares. Llegaron a España y las amenazas les llevaron a ejercer la prostitución en los citados clubes, una desde diciembre de 2003 y a otra desde noviembre. Esta última denunció su situación cuando se enteró en Calatayud de la intervención de Tudela. La otra relató su situación cuando la Guardia Civil entró en el club Tatio, en donde se encontraba. La sentencia absuelve a otras dos personas, un hombre y una mujer, de los delitos de prostitución y detención ilegal.
