BARCELONA, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los dos jóvenes mayores de edad acusados de apalear y quemar viva a una indigente de 51 años que dormía en un cajero automático del barrio barcelonés de Sant Gervasi el pasado 16 de diciembre comparecieron por segunda vez ante la juez en el día de ayer y se acogieron de nuevo a su derecho de no declarar, como ya hicieron durante su primera comparecencia.
Según informaron a Europa Press fuentes judiciales, la juez de Instrucción número 9 de Barcelona, Silvia López Mejía, llamó a declarar a los dos acusados, Ricard P.B. y Oriol P.S., tras aceptar las nuevas diligencias interesadas por el Ministerio Fiscal, las diferentes acusaciones y las defensas de los imputados.
La petición se llevó a cabo durante la comparecencia en la que las diferentes acusaciones formalizaron la imputación por un delito de asesinato. En concreto, solicitaron que los dos procesados volvieran a comparecer ante la juez encargada del caso e interesaron la declaración del responsable del 'cibercafé' frecuentado por los imputados y de un amigo que aseguró haber presenciado cómo agredieron a otros indigentes.
Las defensas, por su parte, pidieron que se aporten a la causa los informes toxicológicos sobre el disolvente que los procesados utilizaron para presuntamente acabar con la vida de María Rosario E.P. y los informes sobre los objetos que se recogieron en el cajero --los acusados lanzaron contra la indigente una naranja, un cono, una botella e, incluso, una tapa de váter-- y sobre la ropa que llevaba la fallecida.
Los letrados solicitaron, además, que se aporte la documentación relativa al tipo de licencia que tenía la empresa constructora que estaba trabajando en la misma finca donde ocurrieron los hechos, y de cuyo andamio los jóvenes cogieron presuntamente el líquido inflamable, y los certificados sobre las medidas de seguridad que se habían adoptado en el cajero donde se produjo el crimen.
RATIFICAN QUE AGREDIERON A OTROS MENDIGOS.
En lo que respecta a la declaración del responsable del cibercafé frecuentado por los imputados y del amigo que aseguró haber presenciado cómo agredieron a otros indigentes, ambos ratificaron ante la juez lo que ya habían declarado ante los Mossos d'Esquadra, según explicaron a Europa Press fuentes judiciales.
El amigo de los detenidos fue citado para saber si tenía constancia de las actuaciones delictivas que se atribuyen a Ricard P.B., Oriol P.S. --ambos de 18 años y vecinos de Barcelona-- y a J.J.M.R., de 16 años. Según el joven, el pasado octubre, Oriol le invitó a pasar las fiestas del Pilar en Zaragoza, junto a un hermano suyo y a Ricard. Allí, los acusados habrían grabado con su teléfono móvil varias agresiones y vejaciones a otros indigentes.
En concreto, el testigo ratificó ante la juez que presenció tres agresiones (bromas pesadas) a mendigos cometidas en Zaragoza. El joven aseguró haber visto cómo lanzaban un contenedor de basura contra un indigente que estaba tumbado en un banco, además de presenciar cómo pegaban un bofetón a otro mendigo y cómo le arrojaban una papelera a una tercera indigente.
Según el testigo, conoce a los acusados porque él también frecuenta el 'cibercafé' 'Netgaming', situado en la calle Brusi del barrio de Sant Gervasi. Era en este local donde Ricard, Oriol Y J.J. presuntamente mostraban las imágenes de las agresiones grabadas con su teléfono móvil y se las intercambiaban a través de 'bluetooth'.
Las acusaciones solicitaron la comparecencia de uno de los responsables del 'cibercafé' precisamente para que pudiera explicar cómo era el comportamiento de los jóvenes en el local. El testigo debería haber declarado ante la juez el pasado 2 de febrero, pero finalmente no pudo acudir juzgado. Ayer lo hizo y ratificó lo que ya explicó a los Mossos d'Esquadra.
Según informaron fuentes judiciales, ahora ya sólo quedan por declarar los agentes de la Policía autonómica encargados de la investigación. Éstos deberán ratificar sus atestados ante la juez y aclarar algún aspecto si las diferentes partes lo consideran necesario.
Los dos acusados mayores de edad, Ricard P.B. y Oriol P.S., permanecen en la prisión de jóvenes de la Trinitat desde el pasado 21 de diciembre, ya que se les imputa un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento. Por su parte, la juez de menores decretó un día antes régimen cerrado para el acusado menor de edad, J.J.M.R., que permanece en el centro de internamiento para jóvenes Els Tillers, en Mollet del Vallès (Barcelona).
