MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
Eusko Alkartasuna (EA) y Nafarroa Bai coincidieron esta tarde, en la segunda jornada del Debate sobre el estado de la Nación, en reclamar un cambio de política penitenciaria para el acercamiento de presos de ETA, a lo que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, replicó que "casa cosa tiene su tiempo" y que el proceso de paz debe contemplarse "con perspectiva.
La diputada de EA, Begoña Lasagabaster, aseguró que se ha abierto un escenario en el que debe hacerse "política con mayúsculas", mirando más allá "del corto plazo". Tras quejarse de que la reforma estatutaria vasca conocida como 'Plan Ibarretxe' no fue tratada igual que las que llegaron de Cataluña, Comunidad Valenciana o Andalucía, ya que "sólo recibió un No rotundo" con unas razones "que hoy se han desmoronado", reiteró que las fuerzas políticas vascas volverán a traer el debate.
Eso sí, cree que el debate se producirá "cuando todas las formaciones vascas puedan sentarse a la mesa", en alusión a la izquierda abertzale. "Confiamos en que nadie vete este procedimiento y que nadie se excluya --aseveró--. Desconozco el resultado del debate, pero sea cual sea, debe respetarse".
Asimismo, quiso referirse a la situación de la Justicia "en sentido amplio", precisando que su reflexión no es fruto de la "situación coyuntural de esta tarde" --por la citación ante la Justicia de los dirigentes de Batasuna--, sino que tiene su origen en debates anteriores.
En concreto, empezó por reiterar su rechazo a "reformas legislativas reaccionarias" que, como las medidas de incomunicación de terroristas, no respetan a su juicio "cuestiones básicas" de derechos humanos. También lamentó la "politización" del Poder Judicial por parte de un sector del mismo, así como las incomparecencias del presidente del Consejo, Francisco José Hernando, ante la Cámara.
Por último, exigió el cumplimiento del Estatuto de Gernika para transferir las cárceles al Gobierno vasco y, desde ya, un cambio de política penitenciaria para el acercamiento de los presos de ETA, alegando que actualmente se condena a éstos y también a sus familias.
NA-BAI: GENEROSIDAD Y VALENTÍA
Por su parte, la diputada de Nafarroa Bai (coalición nacionalista vasca por Navarra), Uxue Barkos, incidió en la exigencia de un cambio de la política penitenciaria como gesto necesario para demostrar que se se acomete el proceso de paz "con generosidad y valentía".
Y al acercamiento de presos, que considera "un gesto de vanguardia", añadió un amplio reconocimiento de las víctimas del terrorismo, y no sólo de las de una parte. En este sentido, reclamó la presentación de la prometida Ley de Memoria Histórica, que es "la esperanza de ver reconocidos los derechos de aquellos a los que se les debe la devolución de la dignidad".
También aprovechó para recalcar que "el futuro de Navarra está exclusivamente en manos de los ciudadanos de Navarra" y para rechazar intentos de "dibujar peligros irreales para entorpecer el proceso" y de "utilizar Navarra para sus propios réditos electorales", en alusión a la UPN y el PP.
ZAPATERO ACONSEJA "LUCES LARGAS"
En su respuesta, Zapatero agradeció la "claridad" de las diputadas e insistió en la conveniencia de contemplar la situación creada tras el 'alto el fuego' con "perspectiva histórica", sabiendo que "es un error dar un análisis y una respuesta cada día a lo que dicen unos y otros". "Pongamos perspectiva, dado el alcance y el calado que supone la tarea de ver el fin de la violencia después de tantos años --agregó--. Hay que poner las luces largas cuando los problemas tienen profundidad, como éste".
A su juicio, hay condiciones para un "gran acuerdo de alcance" sobre el futuro de Euskadi, pero también debe haber "voluntad política" por parte de todos, sabiendo que se necesitará "una larga conversación", que nadie tiene "la verdad absoluta" y que hay unas reglas de juego institucionales que conforman el marco normativo que debe respetarse.
"Si queremos hacer algo de gran alcance, se necesita acuerdo político --apostilló--. Sin duda nos llevará tiempo, pero la predisposición del Gobierno es que eso se pueda realizar, con el máximo protagonismo de las fuerzas políticas vascas".
Según explicó, su deseo es que ese acuerdo político en torno al futuro de Euskadi se alcance en Euskadi, aunque luego haya que respetar las reglas del juego que fijan la participación de las Cortes Generales, y al final "la última palabra está siempre en manos de los ciudadanos".
Sobre el Poder Judicial, indicó que, por mucho que no guste la configuración del Consejo, debe expresarse siempre respeto por las decisiones de la Justicia. De hecho, dijo que, desde que es presidente, no ha valorado ninguna decisión judicial. "No lo he hecho, no lo voy a hacer y no lo haré, porque los ciudadanos deben tener confianza plena en quienes aplican la ley", sentenció.
Ante las demandas de modificar la política penitenciaria, reconoció "credibilidad" a EA por haber defendido el acercamiento de los presos de ETA desde hace tiempo, más allá del proceso de paz reciente, pero replicó que "cada cosa tiene su tiempo", dando a entender que no tiene previstas medidas en este terreno a corto plazo.
RESPUESTAS SIN PREGUNTA PERO CON INTENCIÓN
En cuanto a la situación Navarra, Rodríguez Zapatero coincidió con Uxue Barkos en que en los últimos tiempos se han dicho "cosas graves" con una "intención" determinada que no quiere juzgar desde la tribuna. "Ha habido mucha gente que ha hablado de Navarra --relató--.
Algunos dan respuestas sin hacer preguntas y que otros dicen que existían compromisos sin preguntar. El tiempo hará que respondan de ella (la intención)".
Rodríguez Zapatero aprovechó para dejar claro que la voluntad del Gobierno es el respeto "absoluto" al ordenamiento jurídico, al marco legal de Navarra y el respeto a las decisiones de los navarros. "Los navarros son los dueños de su futuro y de sus instituciones", proclamó, pidiendo "tranquilidad" a todas las partes para no entorpecer el "debate democrático natural". En su dúplica, Barkos agradeció el "compromiso" de Zapatero con la decisión de los navarros.
En el transcurso del debate, Uxue Barkos también pidió "compromisos, más que cifras", para la protección del euskera en Navarra, inversiones en infraestructuras y apoyos al sector industrial frente al fenómeno de la deslocalización. Se refirió también a la inmigración, donde pidió "solidaridad" desde Europa además de medidas de control, y donde aprovechó para criticar, en referencia al PP, que este fenómeno se mezcle con la delincuencia, lo que considera "una absoluta grosería intelectual".
