Madrazo propone que las instituciones y las fuerzas democráticas continúen su trabajo "para avanzar hacia la normalización política"
BILBAO, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de Ezker Batua-Berdeak y consejero de Vivienda y Asuntos Sociales, Javier Madrazo, aseguró hoy que "la vía de la política no puede clausurarse en función de lo que haga o no haga ETA", ya que la actividad de los partidos "tiene su autonomía" y éstos "no pueden darle la llave de la política a ETA o a la izquierda abertzale", ya que "sería poco menos que cargarnos la democracia". Además, propuso la necesidad de que las instituciones y las fuerzas democráticas continúen su trabajo "para avanzar hacia la normalización política".
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, Madrazo explicó que, tras la ruptura del alto el fuego por parte de la banda terrorista, se vive "una situación complicada y difícil, sobre todo, porque hay muchas personas que han vuelto a vivir en la zozobra y en la angustia por la amenaza que sienten de las acciones de ETA".
En este sentido, añadió que "en realidad la tregua ya se rompió el 30 de diciembre con el asesinato de los dos trabajadores de origen ecuatoriano en la T-4", por lo que el último comunicado de la banda supondría tan sólo "una declaración formal".
El coordinador general de EB-Berdeak incidió en que, tras conocerse esta noticia, la reacción debe consistir en "seguir trabajando por la paz y la normalización política" ya que se mostró convencido de que "al final vamos a conseguir la paz, no vamos a ser una excepción en el conjunto de Europa, aunque en el corto plazo las cosas no pintan bien". "Yo confío en el empuje de la sociedad vasca, que no va a permitir que ETA imponga su voluntad", añadió.
Madrazo reconoció que la vía policial y la judicial son "necesarias para poner a disposición de la Justicia a todas aquellas personas que estén dispuestas a vulnerar derechos humanos fundamentales como es el derecho a la vida, a la integridad física", pero agregó que, "al mismo tiempo, la vía de la política no puede clausurarse en función de lo que haga o no haga ETA".
"La vía de la política tiene su autonomía porque no podemos darle la llave de la política a ETA o a la izquierda abertzale, eso sería poco menos que cargarnos la democracia", remarcó.
En este sentido, planteó que las instituciones y las fuerzas democráticas deben continuar su trabajo "para avanzar hacia la normalización política", sin supeditarse ni a un anuncio de tregua ni de ruptura de esa tregua por parte de ETA. "La vía de la política y del diálogo entre las fuerzas políticas tiene que avanzar, porque eso es lo que más daño hace a ETA, que lo que quiere es tener en sus manos la llave de la política", señaló.
PRESIONES
Preguntado sobre las presiones que reciben a algunos concejales, denunció que los ediles de la izquierda abertzale cometen una "inmoralidad" al tomar posesión de sus actas "al tiempo que callan ante la amenaza" que sufren los que van a ser sus compañeros de Ayuntamiento, que tendrán que ir escoltados el próximo sábado al pleno de configuración de las corporaciones "por la angustia que sienten ante la amenaza terrorista".
El dirigente de izquierdas también criticó que los responsables de la izquierda abertzale "se lleven las manos a la cabeza cuando se producen determinadas actuaciones del Estado, que son ilegales o merecen un reproche político, al mismo tiempo que callan ante la ruptura de la tregua por parte de ETA, que significa la máxima expresión de la vulneración de los derechos humanos".
"Esto es una auténtica inmoralidad, hay que denunciarlo abiertamente, esta doble vara de medir de la izquierda abertzale, que defiende los derechos humanos cuando son ellos los perjudicados, pero que les resulta indiferente y viven con absoluta pasividad y silencio cómplice la vulneración de derechos humanos que comete ETA", añadió.
Para Madrazo, la respuesta de la izquierda abertzale ante la situación de los concejales amenazados "les resta todo tipo de credibilidad y de autoridad a la hora de hablar de paz o de normalización política", sobre todo, porque se trata de "personas a las que ellos conocen, de sus pueblos, de sus barrios, de sus ciudades, que conocen en el día a día, que ahora van a tener que ir escoltadas y que están viviendo una gran zozobra".
