El ejecutivo bilbaíno acusado de matar a su hija, declarado no culpable por locura transitoria

Actualizado: sábado, 12 enero 2008 10:07


MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El multimillonario ejecutivo bilbaíno Alberto fue encontrado hoy por un jurado británico no culpable de la muerte de su hija, de dos años, la cual falleció a causa de los golpes que su padre le propinó en la cabeza, debido a que sufrió un episodio de locura transitoria.

Según la BBC, Izaga había visto varias películas de terror días antes de atacar a su hija, y durante el incidente, ocurrido el pasado 3 de junio de 2007, sufría un "episodio de enfermedad mental aguda". La pequeña quedó inconsciente a causa de los golpes, pero murió dos días después en el hospital debido a una fractura craneoencefálica múltiple.

El juez Richard Hone dictaminó el traslado del empresario bilbaíno desde el centro Albert Embankment, en Londres, a un hospital mental de forma indefinida y lo calificó de un "caso excepcional". Además, Izaga fue suspendido de su puesto en la firma aseguradora Swiss Re tras la muerte de su hija.

OBSESIÓN CON LA PELÍCULA "BUG"

El tribunal escuchó que Izaga vio la película de terror "Bug",en la que una pareja se vuelve loca cuando unos bichos comienzan a correr bajo su piel durante unas vacaciones en Estados Unidos. Poco después acudió a una conferencia en ginebra y quedo sensiblemente afectado por una charla de motivación dada por un aventurero.

Cuando regresó a su casa, por la cual pagaban un alquiler de más de 1.460.000 el 2 de junio se quejó de estar exhausto y de insomnio. Aun así, el día de los hechos se despertó pronto y se pasó cerca de dos horas hablando mal de Dios y las sectas antes de atacar de repente a su hija.

La mujer de Izaga, Ligia, intentó detenerle y después declaró que su marido decía mientras tanto "Se lo que tengo que hacer, tengo que matarla". Además, el fiscal Jonathan Rees aseguró que la niña, Yanire, sufrió "múltiples fracturas craneoencefálicas que coincidían con los golpes que su padre le dio contra el suelo".

El empresario fue detenido y llevado a una institución psiquiátrica tras los hechos, según escuchó el tribunal. Asimismo, os doctores aseguraron que sufría "un episodio de enfermedad mental aguda con un rápido inicio".

Rees también alegó que Izaga estaba "totalmente entregado" a Yanire y que tras lo ocurrido la describió como "su persona mas querida en la tierra". El tribunal escuchó además parte del ataque que quedó registrado en el contestador de un vecino cuando la madre de la niña gritaba pidiendo ayuda. Además, se escucha a Izaga maldiciendo en inglés y español.

El empresario gritaba "Sólo quiero dormir (...) Dios no existe, el universo no existe, la humanidad no existe". Además, cuando llegó la Policía y los paramédicos aún decía "Big Ben, Big Ben".

Durante su interrogatorio, Izaga aseguró que no recordaba nada de lo sucedido. Dos doctores confirmaron al tribunal que Izaga sufría esquizofrenia o un "desorden sicótico intenso" en el momento del ataque.