MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional acordó hoy suspender el 'macrojuicio' que sigue contra 55 miembros del supuesto entorno de ETA hasta el próximo día 18 para que el abogado del acusado José Ramón Antxia, Jesús María Amuñategi, pudiese estudiar el sumario y preparar las preguntas a su cliente, ya que asumió la defensa recientemente.
La presidenta del tribunal, Ángela Murillo, "hizo pública" la decisión de aplazar la sesión, para "garantizar el derecho a la defensa" de Antxia, después de que tanto el fiscal Enrique Molina como el abogado de la acusación particular, ejercida por la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), se manifestasen favorablemente a la petición de Jesús María Amuñategi.
En concreto, la presidenta explicó que las sesiones suspendidas corresponden a las de mañana martes y el miércoles, que, añadidas a las vacaciones de Semana Santa, harán que el 'macrojuicio' no se reanude hasta el próximo día 18. El fiscal, por su parte, argumentó que no ve "ningún inconveniente" a la suspensión, puesto que "no se aprecian intenciones dilatorias" en la petición del abogado.
El acusado José Ramón Antxia, quien se enfrenta a una petición del fiscal de 15 años de prisión por integración en organización terrorista, está acusado en la pieza relativa a la Asociación Europea Xaki, considerada por el Ministerio Público el aparato de relaciones internacionales de ETA, que esta tarde comenzaba a juzgarse después de que concluyese la declaración de la también imputada Olatz Altuha.
NIEGA SEGUIR DIRECTRICES DE ETA.
En su declaración, Olatz Altuha, empleada de la fundación Joxemi Zumalabe y acusada por el fiscal de colaboración con ETA, aseguró que su trabajo en la fundación consistió exclusivamente en la realización de labores técnicas y de organización, y rechazó que siguiese directrices de ETA o de Ekin, supuesto brazo político de la organización terrorista.
Además, negó que la organización Joxemi Zumalabe fuese la encargada de impulsar la "campaña de desobediencia civil" de ETA, como sostiene el fiscal, y afirmó que tan sólo se ocuparon de coordinar la celebración de unos encuentros en los que se abordó la desobediencia civil "desde posturas muy diferentes". Las asociaciones que participaron en las jornadas fueron, prosiguió, "de muy diversa índole", desde organizaciones a favor de los derechos de los homosexuales a asociaciones de vecinos, asambleas de mujeres, e incluso organizaciones relacionadas con la informática.
Cuando se reanude el juicio, comenzarán a declarar los acusados por su relación con Xaki, que el fiscal considera que se encargaba de promocionar una imagen positiva de la organización terrorista en el extranjero, coordinaba las relaciones exteriores de las diferentes organizaciones del Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV), y acogía a los etarras huidos en otros países, les ponía en contacto con la banda y preparaba su vuelta clandestina a España.
