BARCELONA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP catalán y candidato a la presidencia de la Generalitat, Josep Piqué, aseguró hoy que su formación realizará una campaña "importante" en feudos del PSC para atraer a votantes socialistas descontentos con la dirección que ha emprendido el partido.
En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press, el dirigente popular aseguró que el gran error del PSC ha sido "anteponer el nacionalismo a los valores clásicos de la izquierda" y dijo que su partido tiene "expectativas de crecimiento" en feudos tradicionales socialistas, como los cinturones de Barcelona y Tarragona.
Para Piqué, situaciones como la renuncia de Pasqual Maragall a la reelección o la baja como militante de su mujer, Diana Garrigosa, son "el reflejo de un cúmulo de despropósitos, traiciones y errores del socialismo catalán" en los últimos años.
Piqué consideró que la primacía del catalanismo sobre los valores tradicionales de izquierda ha provocado "una ruptura interna muy importante" en el PSC que no se sabe "qué consecuencias tendrá" y añadió que no ve a José Montilla como "la persona idónea para superar la situación".
Es por ello que el PP focalizará su campaña en feudos socialistas para explicar a los votantes del PSC en anteriores comicios que la formación "ha aumentado su grado de reivindicación nacionalista, ha abandonado las políticas sociales y ha hecho que el debate político en Catalunya haya sido más identitario que nunca".
Josep Piqé aseguró que ve al electorado del PP con "muchas ganas" y señaló que el referéndum del Estatut sirvió para "movilizar a mucha gente que ha visto cómo Catalunya tiene una clase política obsesionada por sus problemas y en redistribuir el poder, pero no en los problemas de los ciudadanos".
En este sentido, Piqué se comprometió a hacer una campaña electoral "centrada en los problemas de los ciudadanos" y en "rehuir lo que sea posible los problemas que sólo nos preocupan a los políticos".
El dirigente del PP catalán ejemplificó esta situación en el caos de El Prat, en el que miles de ciudadanos se vieron afectados, mientras que en Catalunya "el debate política se ha centrado en quien debe mandar en el aeropuerto y no en ver qué pasó y como resarcir a los ciudadanos".
"VERANO TERRORIFICO".
En otro orden de cosas, Josep Piqué calificó el verano de "terrorífico" por el "elevadísimo nivel de incompetencia y falta de respuesta" del Gobierno en asuntos como el aeropuerto de El Prat, los incendios en Galicia o la llegada de cayucos, "producto de una pésima política de inmigración".
Piqué también criticó el "mal llamado proceso de paz", el cual calificó de "apuesta temeraria y personal de Zapatero que no responde a ningún cambio de estrategia o filosofía de ETA". El dirigente del PP sostuvo que "generar esperanza cuando no hay cambios es una irresponsabilidad".
Finalmente, el dirigente popular mostró su "alegría" por la victoria de la selección española de baloncesto en el Mundial de Japón y reconoció que ha sido "más fácil de lo previsto" como consecuencia de un partido "muy bien planteado desde el inicio". Piqué pidió que el Gobierno no se apropie de esta victoria cuando "todo el mundo sabe que es mérito de los jugadores".
