Solomon ha mostrado "su apoyo y respeto", en relación con las "difíciles decisiones" que el Gobierno de Rajoy ha tomado
MURCIA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El embajador de Estados Unidos en España y Andorra, Alan D. Solomon, ha desvelado que el presidente norteamericano, Barack Obama, y su homólogo español, Mariano Rajoy, conversaron sobre la crisis de la Eurozona y las "difíciles decisiones" que el Ejecutivo español "ha tenido que tomar". Asimismo, el embajador ha transmitido que existe un "deseo por seguir hablando de estos temas entre los dos y juntos", ya que "el destino de la economía europea está muy entrelazada con el de Estados Unidos".
Cabe recordar que Rajoy mantuvo el lunes una conversación telefónica de "media hora" con Obama en la que analizaron la situación económica de España, de la Unión Europea y a nivel mundial, según informó la Moncloa en un comunicado.
Solomon ha hecho estas declaraciones poco después de ser recibido por el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, en un encuentro que han mantenido con motivo de la visita del embajador a la Comunidad, donde tiene previsto recibir este martes el premio Catedral del Cante que otorga el Festival del Cante de las Minas de La Unión, en reconocimiento a la labor de su nación en la conservación, promoción y difusión de la cultura y el arte flamenco.
El representante estadounidense ha hecho relación a la conversación que mantuvieron Rajoy y Obama, en la que hablaron "sobre la crisis de la Eurozona", ya que, según ha indicado, el presidente de Estados Unidos "tenía interés por conocer el punto de vista y las perspectivas" del presidente español al respecto.
Asimismo, ha transmitido que Obama ha querido expresar "su apoyo y respeto" en relación con las "difíciles decisiones que este gobierno --el español-- ha tenido que tomar".
El embajador ha expuesto que "la relación de socios que existe entre los dos países es mucho más profundo que simplemente una relación entre dos gobiernos". Así, ha plasmado en el libro de visitas de la comunidad el agradecimiento de Estados Unidos por la recepción y ha mostrado su apoyo a la economía reiterando que España "no está sola" ante la crisis.
