El primer ministro turco firma en el libro de visitas de la Alhambra y da la enhorabuena a sus arquitectos y a los que la hacen perdurar
GRANADA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó hoy en el Ayuntamiento de Granada, donde fue recibido por el alcalde de la ciudad, José Torres Hurtado, que la alianza de civilizaciones es el "medicamento" contra el terrorismo y su "principal obstáculo".
En su discurso, tras el que fue obsequiado con las llaves de la ciudad por parte del alcalde, el primer ministro turco señaló que Granada es un ejemplo de alianza de civilizaciones y subrayó el papel que Turquía junto con España ha de jugar para conseguirla, destacando la labor del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
De este modo, sostuvo que tanto españoles como turcos saben lo que es el terrorismo y por eso, según dijo, ambos países "se entienden muy bien". Así, señaló que se conseguirá el éxito en la alianza gracias al trabajo, el esfuerzo y la creencia en que así se hará.
Erdogan llegó hoy a Granada antes de participar en el I Foro de la Alianza de las Civilizaciones. Durante su estancia en la ciudad visitó en primer lugar la Alhambra, donde se interesó sobre todo por los aspectos decorativos de ésta, mientras que su mujer, Emine, lo hizo por la vegetación en el recinto monumental.
El primer ministro llegó con casi dos horas de retraso al Palacio de Carlos V, donde le esperaban un grupo de unas 25 personas de la comparsa de turcos de la Fiesta de Moros y Cristianos de Sax (Alicante), algo que ya tenía previsto la embajada turca, con la que dijeron tener muy buenas relaciones. Ataviados con trajes turcos, entregaron a Erdogan un libro sobre la historia de Sax y su relación con Turquía y se hicieron fotos con toda la comitiva que acompañaba al primer ministro, cuatro ministros de su gobierno y sus respectivas mujeres.
A las puertas del Palacio le esperaban multitud de periodistas locales y turcos, acompañados de curiosos y un amplio despliegue policial. Antes de entrar al Carlos V, Erdogan se detuvo en uno de los frisos del Palacio, una alegoría de la paz, en la que aparecen pequeños ángeles quemando armas, símbolos de la guerra. Según explicó a los periodistas la directora del Patronato de la Alhambra, María del Mar Villafranca, que acompañó al primer ministro y su comitiva, este elemento tiene relación con la historia de Turquía ya que se realizó después de que Carlos V firmara la paz con el emperador otomano Solimán.
EN EL LIBRO QUE INAUGURÓ WASHINGTON IRVING.
En el Palacio el primer ministro turco firmó en el libro de visitas del monumento, el que fue inaugurado por Washington Irving. En él escribió: "Empezamos a revivir en vivo la historia mientras visitamos el palacio de la Alhambra. Enhorabuena a sus arquitectos y a las personas que la hacen perdurar. Recep Tayyip Erdogan, primer ministro de Turquía. Palacio de la Alhambra, 13 de enero de 2008".
Dentro del recinto monumental visitó además las dependencias de los palacios nazaríes, el patio de los Arrayanes, el de los Leones, los baños y las habitaciones de Washington Irving, entre otros. Según indicó Villafranca, el primer ministro hizo muchas preguntas relacionadas con la decoración del recinto y, junto con su mujer, se mostró "francamente impresionado".
Mostró así interés por los colores de los azulejos y las maderas, los atauriques y otros elementos decorativos. En el Salón del Trono afirmó que su suelo podría ser buen ejemplo de la alianza de civilizaciones, puesto que está compuesto tanto por pequeñas piezas originales como por otras restauradas.
En los baños, en el Hamam, le llamaron la atención los colores de los azulejo, que Villafranca le explicó que eran, el verde y el azul, los colores identitarios de la cerámica nazarí. Por su parte, la primera dama se interesó por la vegetación del recinto y consiguió identificar un mandarino en el Patio de Lindaraja, donde comentaron la exclusividad de las decoraciones cerámicas.
Tras la visita a la Alhambra, el primer ministro se dirigió a la Mezquita Mayor, donde fue recibido por el presidente de la Comunidad Islámica en España, Malik Ruiz y por su director, Abdelhasib Castiñeira. Allí participó en la oración y visitó el Centro de Estudios Islámicos. Desde el balcón de la Mezquita y tras posar para la multitud de fotógrafos que allí se congregaban dijo su única palabra en español: Gracias.
Después se dirigió al Ayuntamiento, donde el alcalde y su esposa le recibieron acompañados por miembros de la corporación municipal. En el Salón de Plenos del Consistorio el primer edil granadino le informó de lo "cosmopolita" de la ciudad "de las tres culturas" y habló de la Universidad --y destacó el número de estudiantes turcos en Farmacia--, de Sierra Nevada y del Festival de Música y Danza, entre otros.
Al término del acto protocolario, en el que el primer ministro entregó un obsequio al alcalde, que le dio las llaves de la ciudad, paseó por las calles de la ciudad y algunos de sus rincones más emblemáticos, en el que destaca la Capilla Real, donde se encuentra ubicada la tumba de los Reyes Católicos.
Tras el paseo por la ciudad, el alcalde ha organizado una cena en honor del primer ministro en el Palacio de los Córdova, tras la que volverá tomar su avión privado para dirigirse, junto con una comitiva de unas 40 personas a Madrid, donde se celebrará el I Foro de la Alianza de las Civilizaciones.
