BARCELONA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, anunció esta noche que la formación republicana votará en contra de la definición de Cataluña pactada entre PSOE y CiU por considerarla "inaceptable" y esperará a conocer las cifras del pacto sobre financiación para decidir su voto a la totalidad del proyecto de Estatut en su tramitación en las Cortes.
Carod transmitió la decisión de ERC al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante la reunión mantenida hoy en La Moncloa y en la que republicanos y PSOE se emplazaron a continuar con negociaciones a partir de mañana, a las que se incorpora por primera vez el propio Carod hasta determinar el voto final de ERC.
En rueda de prensa en la sede del partido, Carod aseguró que "queremos decir sí, pero no por cuatro reales y media docena de frases bien escritas desde el punto de vista literario". No obstante, admitió que la aprobación del nuevo Estatut "ya no depende de nosotros" por lo que señaló que "sólo sumaremos nuestro voto si consideramos que los puntos que todavía no están cerrados se resuelven de forma aceptabe y satisfactoria".
Según Carod, tras el pacto CiU-PSOE el texto del Estatut sólo obtendría "un insuficiente alto" y confió en que en los próximos días alcance, "como mínimo, un aprobado", para lo que ERC hará valer la "modestia de nuestras fuerzas" de 23 diputados en Catalunya y 8 en el Congreso.
Carod rehusó entrar a criticar abiertamente la estrategia de CiU y se limitó a señalar que la federación nacionalista ha protagonizado la "repetición de la jugada" de Catalunya añadiendo con ironía que es "lo más normal del mundo" y que "cada uno va a buscar lo que va a buscar". En este sentido, deseó a Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida que "la foto de mañana con Zapatero salga bonita y en colores" y concluyó que "cada uno se dedica a lo suyo" y "hace lo que cree oportuno para sus intereses".
Por contra, señaló que ERC no se quiere "precipitar" y no dará su sí a la totalidad del Estatut hasta que no dispongan con "detalle y por escrito la concreción de todos y cada uno de los puntos que permita un acuerdo final y el voto favorable de ERC". "No queremos cometer el mismo error que se cometió en 1979", dijo y por ello "queremos continuar hablando" ya que "quedan temas, puntos, asepctos y cuestiones abiertas y en algún caso, demasiado abiertas". "Tenemos la botella medio llena pero no nos conformamos, la queremos todavía más llena", subrayó.
Según Carod, durante la reunión con Zapatero fueron "informados" del pacto con CiU y se le informó de antemano del voto en contra de los republicanos a una definición que consideran "inaceptable". En financiación, ERC fijará su posición sólo en función de un "texto escrito, articulado y con cifras en la mano que hoy no existe". En concreto, los republicanos quieren saber si "estamos hablando de cuatro reales o de un modelo que suponga un paso adelante de verdad". Por tanto, añadió que "a día de hoy no ha posibilidad de que demos nuestro apoyo en financiación".
Al margen de estos dos aspectos, citó como cuestiones abiertas la supresión y rescate de peajes, el Título del Poder Judicial, la presencia de Cataluña en la UNESCO o el traspaso de infraestructuras de interés general --puertos y aeropuertos--. ERC insiste en el traspaso de la gestión a la Generalitat y la creación de un consorcio con participación del Estado, ayuntamientos e iniciativa privada. Por otra parte, destacó los avances importantes en lengua e inmigración.
Carod aprovechó su comparecencia para recordar que "sin la tozudería y el patriotismo de ERC en estos años no estaríamos donde estamos" y señaló que "Cataluña ha dicho por primera vez en un cuarto de siglo qué queremos y qué proyecto necesitamos". En esta línea, se "felicitó por el cambio de posición de CiU", que "después de estar 25 años en contra de reformar el Estatut ha pasado de un 'no' a un 'sí' desde la oposición".
