MADRID, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La dirección del Partido Nacionalista Vasco (PNV) ha trasladado al Partido Socialista de Euskadi, en reuniones privadas, la necesidad de realizar un acercamiento de presos de ETA al País Vasco, según informaron a Europa Press fuentes nacionalistas.
Esta es una petición que el PNV le viene trasladando desde hace varios meses a los socialistas y también al Gobierno y una de las últimas ocasiones en que lo ha hecho ha sido durante el encuentro que mantuvieron el pasado lunes.
A éste acudieron el presidente del Partido Nacionalista Vasco, Josu Jon Imaz, el presidente del BBB, Iñigo Urkullu, el secretario general del PSE, Patxi López y el portavoz, Rodolfo Ares. El argumento de los nacionalistas es que sería bueno desmontar la afirmación que está realizando la izquierda abertzale de que el Ejecutivo no ha hecho ningún gesto, ni ha dado ningún paso que favorezca el proceso. Consideran que con un paso de este tipo, el Gobierno podría restar argumentos a ese mundo.
En este mismo sentido se expresaba esta mañana Iñigo Urkullu, quien asegura que una política penitenciaria "diferente" podría ayudar a rebajar tensiones y apuntaba también que este gesto no tendría por qué verse como un "precio político".
Animaba, en este sentido, a que el Ejecutivo de pasos "atrevidos" después de llevar meses "escuchando" que el proceso de paz está en crisis, bloqueado o que atraviesa un periodo de dificultad.
NO ES EL MOMENTO
Sin embargo, la respuesta de los socialistas y del Gobierno ha sido la misma en las ocasiones en las que el PNV ha planteado esta cuestión y es que no es el momento de realizar acercamiento de presos de ETA al País Vasco.
La postura del PNV es que este planteamiento --de acercamiento de presos-- se debe hacer de una manera discreta y no realizando un planteamiento como el que ha hecho ERC en el Parlamento, que está promoviendo un frente de los partidos minoritarios con representación en el Congreso para exigir al Gobierno que adopte medidas para evitar que el proceso de paz fracase, entre ellas, el acercamiento de presos.
Por ello, el PNV y también CiU han optado por no sumarse a esta iniciativa, y no tienen previsto acudir a la reunión que ha convocado para mañana el presidente del grupo de ERC en el Congreso, Agustí Cerdá, con el fin de exponer su idea a las minorías.
Los nacionalistas vascos y catalanes coinciden en recordar que todos los grupos, salvo el PP, dieron su aval al Ejecutivo para abrir el diálogo con ETA tras el alto el fuego permanente decretado por la banda y que mantienen su confianza en el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para dirigir el proceso.
En el PNV van aún más allá y advierten de que sería "una gran irresponsabilidad" promover iniciativas "desde la ignorancia", habida cuenta de que admiten que los grupos parlamentarios no saben a ciencia cierta qué está pasando entre el Gobierno y ETA.
En este sentido, apuntan que el foro que plantea ERC podría ser incluso contraproducente porque desde él se podrían lanzar propuestas que perjudicaran la estrategia diseñada por el Gobierno, y por eso abogan por la discreción.
