La banda recupera el cebo de la 'kale borroka' para asesinar ertzainas, como planeaba Arkaitz Goikoetxea hacer en Getxo
MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas de Seguridad sospechan que uno o más miembros 'liberados' de la organización terrorista ETA habrían sido enviados por el aparato militar a Vizcaya para reactivar a los grupos de 'legales', no fichados, que habrían escapado a la desarticulación del "núcleo central" del complejo que operaba en esa provincia hasta las detenciones efectuadas por la Guardia Civil a finales de julio, informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista. Los atentados de la pasada madrugada en Vitoria y Ondarroa confirmarían esa actividad.
Tras los interrogatorios a las diez personas arrestadas a finales de julio, entre ellas el etarra a sueldo Arkaitz Goikoetxea, se seguían sin tener pistas sobre la autoría de 19 acciones terroristas cometidas desde el final de la tregua, diez de ellas perpetradas en la provincia de Vizcaya. El parón en la actividad terrorista desde la operación de la Guardia Civil --a excepción de las bombas colocadas en agosto en Málaga-- hacen pensar a los investigadores que, con la bomba-lapa adosada a los bajos del coche de un policía nacional en Basauri el pasado miércoles, ETA ha reactivado a sus 'legales' en Vizcaya, retomando las informaciones que ya habrían realizado éstos en el pasado sobre posibles objetivos y la infraestructura del grupo.
De todas formas, las fuentes consultadas se muestran cautelosas sobre el perfil de los líderes de estos 'taldes', ya que atentados del 'complejo Vizcaya' tan arriesgados como el cometido contra una comisaría de la Ertzaintza el 25 de septiembre del pasado año en Zarautz fueron cometidos por miembros de ETA en ese momento desconocidos para las Fuerzas de Seguridad, entre ellos el autor material, que aún sigue en busca y captura, Asier Borrero Toribio.
Los autores de los dos atentados de la pasada madrugada podrían estar vinculados, por tanto, con otros cometidos en Vizcaya tras el final de la tregua y que continúan siendo una incógnita para los investigadores, como la bomba-lapa adosada a los bajos del coche de un escolta el 9 de octubre de 2007 en Bilbao, así como las acciones terroristas contra la sede de 'El Correo' en Zamudio, contra la Casa del Pueblo del barrio bilbaíno de La Peña, los Juzgados de Paz de Sestao, contra un repetidor en el monte Arnotegi --que incluía una trampa para los artificieros de la Ertzaintza-- y una sede del Ministerio de Trabajo en Arrigorriaga.
COMO EN LOS PLANES DE GOIKOETXEA.
Con todo, ETA ha utilizado la pasada madrugada para atacar a la Ertzaintza un plan muy parecido al diseñado por Arkaitz Goikoetxea para asesinar policías autonómicos en Getxo el 31 de julio. Antes de ser detenido, el etarra pretendía organizar una importante algarada de 'kale borroka' que atrajera a los agentes al ascensor de la playa de Ereaga y entonces detonar un coche-bomba aparcado previamente en el lugar. La pasada madrugada, los dos hombres que se bajaron del vehículo tras aparcarlo frente a la comisaría de Ondarroa, lanzaron dos cócteles molotov en su huida para atraer a los agentes y lograr que la explosión acabase con sus vidas. Después, los terroristas huyeron a pie hasta el vehículo donde, previsiblemente, les esperaría un tercero.
El 9 de marzo de 2001, ETA asesinó al policía autonómico Iñaki Totorika, de 25 años, cuando éste y su compañero de patrulla se dirigieron a atender una llamada que alertaba de la quema de unos contenedores en una plaza de Hernani, donde los terroristas habían colocado un coche-bomba, que explotó al llegar los agentes.
