MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso Leopoldo Barreda ha recalcado este jueves que, ni en el caso de que, como demandan los demócratas, ETA se disuelva definitivamente, los terroristas recibirán ninguna contrapartida política.
Barreda respondía así al representante de la izquierda abertzale Joseba Permach, quien interpreta como un "paso en la buena dirección" que el Gobierno "reconozca la dimensión política del conflicto" vasco.
Las palabras de Permach han llegado un día después de que el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, afirmase que ETA ya no es "fundamentalmente un problema policial", sino que tiene "una dimensión política que no se puede obviar y que debe gestionarse de forma distinta".
En declaraciones a Europa Press, Barreda ha querido dejar claro que la voluntad del Gobierno es "lograr la disolución definitiva e incondicional de ETA", es decir, "sin ningún tipo de contrapartida política". "Tienen que tener claro que no van a lograr ninguna de sus pretensiones políticas", ha insistido.
LOS DEMÓCRATAS TIENEN SU PROPIO CALENDARIO
Para remarcar aún más este argumento, ha hecho hincapié en que "nada en el futuro de la sociedad española va a estar condicionado por la voluntad de los terroristas, ni por el hecho de que la banda se disuelva o se deje de disolver". "Como tampoco nada en nuestro pasado va a quedar que permita justificar la historia de ETA o dar la razón a los terroristas", ha rematado.
En este contexto, Barreda ha subrayado que las prioridades de los terroristas "no son las de los demócratas" y que éstos últimos deben tener su "propio calendario".
