BARCELONA, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El abogado que asistió legalmente a Carmen B.L. antes de su detención como principal acusada de asesinar a la psicóloga barcelonesa Anna Permanyer aportó hoy nuevos indicios que podrían incriminar a la imputada por el crimen, ocurrido en septiembre de 2004.
El letrado, Manuel P.L., declaró como testigo en el Juzgado de Instrucción número 11 de Barcelona, donde respondió durante más de dos horas a las preguntas de las partes implicadas en el caso. A día de hoy, son tres las personas que permanecen en prisión provisional por el asesinato de Anna Permanyer, Carmen B.L., de 48 años, Anabel T.P., de 42, y Joan S.B., de 80.
A todos ellos se les acusa de haber asesinado a la psicóloga para quedarse con el piso del edificio Atalaya que ésta había alquilado a la principal sospechosa y con un trastero y con una plaza de aparcamiento del mismo inmueble, situado en la avenida Diagonal de Barcelona. Para conseguirlo habrían falsificado un contrato de arras y habrían obligado a la víctima a firmarlo.
Manuel P.L., que también residía en el edificio Atalaya, había representado a Carmen B.L. en pleitos anteriores y fue quien la asistió legalmente cuando, días después de la desaparición de la psicóloga, la imputada le explicó que tenía un contrato de arras firmado por la víctima y le preguntó qué validez podría tener si la mujer no aparecía.
Fue entonces cuando el abogado le recomendó acudir a comisaría para explicar su situación. La principal imputada, en compañía del letrado, presentó ante la Policía un contrato de arras de 420.000 euros para comprar a la fallecida el piso 18-J del edificio Atalaya.
Según el documento, no obstante, la psicóloga le vendía el piso, el trastero y la plaza de aparcamiento por casi 600.000 euros, por lo que la Policía consideró los 420.000 euros una cifra "desproporcionada".
Fuentes judiciales señalaron que Manuel P.L. declaró ante el juez que siempre tuvo dudas de que Carmen B.L. tuviese suficiente capacidad económica para pagar dicha cantidad a Anna Permanyer, lo que reforzaría la tesis de que que el contrato de arras fue falsificado y que la psicóloga lo firmó bajo amenazas.
Al parecer, la imputada explicó al letrado que guardaba los 420.000 euros en la cuenta bancaria que tenía en Andorra, aunque, según las mismas fuentes, tras la investigación encargada por el juzgado, no se ha encontrado ninguna prueba que permita acreditar que Carmen B.L. disponía de dicha cantidad.
Manuel P.L. ya había declarado ante el juez el pasado mes de marzo, pero se negó a dar los detalles que conocía sobre el caso escudándose en el secreto profesional, que le impedía revelar las cuestiones que trató con la principal imputada antes de su detención.
No obstante, el Colegio de Abogados de Barcelona (ICAB) le dispensó excepcionalmente de mantener el secreto profesional, por lo que el juez decidió citarle de nuevo a declarar para que aclarase las conversaciones que tuvo con Carmen B.L. tras la desaparición de Anna Permanyer.
Por otra parte, la defensa de otra de las imputadas por el crimen, Anabel T.P., presentó hoy ante el juez una nueva petición de libertad provisional para su representada, al considerar que no existen pruebas que la inculpen.
El letrado mantiene que la mujer estuvo en Fraga (Huesca), donde reside, en el momento de los hechos y que, por tanto, no pudo participar en el crimen.
