La FEMP propone que las comunidades financien a los municipios a través de un fondo "incondicional"

Actualizado: martes, 3 junio 2008 17:41

Un estudio presenta las propuestas de la FEMP como una "hoja de ruta" para la reforma de la financiación local, que espera concluya en 2009

MADRID, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) quiere que las comunidades autónomas financien a los municipios a través de un fondo "incondicional" que cubra los servicios impropios prestados por los entes locales, y se sustituya así en gran medida a los fondos que las comunidades otorgan en la actualidad para la realización de proyectos concretos.

El estudio titulado 'La financiación local en España: radiografía del presente y propuestas del futuro', elaborado por un grupo de expertos a encargo de la FEMP, contempla la necesidad de abordar la reforma de la financiación local para garantizar la suficiencia financiera de los municipios y reclama que las comunidades les transfieran la financiación de las competencias que los ayuntamientos están ejerciendo sin tenerlas atribuidas.

Para ello, propone la creación de un fondo "incondicional" basado en parámetros objetivos, sobre todo la población, "suficiente para cubrir con garantías las necesidades emanadas de las competencias legalmente asumidas". El catedrático de economía aplicada de la Universidad de Oviedo Javier Suárez, coordinador del trabajo, explicó que actualmente las comunidades financian a los ayuntamientos fundamentalmente a través de proyectos concretos, lo que, a su juicio, no debe desaparecer pero sí complementarse con esta transferencia.

Según las conclusiones del estudio, los municipios pequeños complementarían su financiación a través de la fijación de los tributos obligatorios actualmente vigentes, mientras que en los de mayor dimensión deberían verse reforzados los sistemas de participación en las figuras tributarias más fácilmente territorializables, flexibles y vinculadas a la capacidad económica de los ciudadanos.

Suárez reconoció que "un tema espinoso" es el del impuesto sobre actividades económicas, ya que su modificación generó "muchas inequidades" entre los municipios y "tal y como está no es muy sostenible y habría que meterle mano". Sin embargo, reconoció que "resucitarlo sería resucitar un muerto". La alcaldesa de Córdoba y vicepresidenta de la FEMP, Rosa Aguilar, incidió en la necesidad de "introducir elementos correctores".

El presidente de la FEMP, Pedro Castro, subrayó que este estudio se trata de "una hoja de ruta" para abordar con el Gobierno y las comunidades la reforma de la financiación local e insistió en que la negociación del nuevo modelo se lleve a cabo de forma "simultánea y vinculada" al de la reforma de la financiación autonómica.

MEJOR DISTRIBUCIÓN DE LOS RECURSOS.

A su juicio, la solución "no es mayor presión fiscal sino una mejor distribución de los recursos". "De esa gran caja imaginaria, que cada uno coja los recursos necesarios en función de los servicios que presta", explicó antes de expresar su voluntad de que la negociación concluya a primeros del próximo año para que la financiación pueda ser incluida en los Presupuestos Generales del Estado.

El portavoz socialista en la FEMP y alcalde de Villafranca de los Barros (Badajoz), Ramón Ropero, subrayó que los ayuntamientos son los que siempre "han dado la cara" ante los ciudadanos a través de los impuestos y criticó que se hable "solo de las comunidades como solo existieran ellas". "Y eso no es así", apuntó tras advertir de que los entes locales "no renunciarán" porque "también son Estado".

Por su parte, el concejal de Hacienda en el Ayuntamiento de Madrid, el 'popular' Juan Bravo, defendió que para que la negociación "fructifique" es importante que el Gobierno tenga una participación "activa" a la hora de diseñar el nuevo modelo. "El Estado debe comprometerse y actuar no sólo como árbitro sino como diseñador", insistió.

Rosa Aguilar destacó la "unanimidad" que ha posibilitado la negociación de la reforma del actual modelo de financiación local y aclaró que los municipios no pretenden enmarcarla en "una confrontación con las comunidades" sino que "se lea la realidad", aunque reconoció que no tienen "mucha sensibilidad municipal".