MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, aseguró hoy que su Ministerio "conoce la preocupación" de los vecinos de los barrios de Movera y Santa Isabel, en la ciudad de Zaragoza, respecto a los problemas de movilidad peatonal que la construcción de la Z-40 les puede provocar, y aseguró que han analizado la situación y van a proponer una solución "para poder resolverla de forma adecuada". "Confío en que daremos respuesta a los planteamientos que se nos hacen, de forma y manera que la movilidad de los peatones y el transporte público queden garantizados en las mejores condiciones", subrayó.
Álvarez respondió así a una pregunta parlamentaria en la Sesión de Control del diputado de la Chunta Aragonesista (CHA), José Antonio Labordeta, acerca de las medidas que va a tomar al Gobierno para solucionar, "satisfactoriamente y a la mayor brevedad posible, las demandan vecinales que alertan sobre las graves afecciones que para la comunicación peatonal directa entre los barrios de Movera y Santa Isabel se van a producir con motivo de la construcción y puesta en marcha de la Z-40 a su paso por el término municipal de Zaragoza"
"Tenemos previsto proponer que para que los peatones puedan llegar al centro médico, se construya una pasarela peatonal sobre la N-II en las inmediaciones de este cuarto cinturón. Para que se pueda acceder al centro escolar, proponemos construir una acera adecuada en la rotonda que está sobre el inicio del falso túnel del cuarto cinturón. Para que el transporte público llegue a ambos lados proponemos mejorar la conexión de las dos glorietas elevadas a construir", explicó.
En este sentido, apuntó que mañana se van a reunir en la Delegación de Gobierno de Aragón el delegado del Gobierno, miembros del Ayuntamiento de Zaragoza, representantes de la pedanía de Movera y miembros de la Demarcación de Carreteras de la Comunidad para buscar la solución "más conveniente". Añadió que el proyecto daba una solución al paso de vehículos mediante la construcción de dos glorietas distantes en 250 metros "la una de la otra, y el paso de peatones mediante un camino lateral que cruza la N-II por un paso superior".
Según dijo, la posibilidad de mejorar la movilidad de los peatones ha hecho que desde el momento en que la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón tuvo conocimiento del problema, "el 13 de febrero de 2007, se empezara a trabajar en buscar soluciones que mejoren las conexiones". Por tanto, resaltó que se han estudiado "diversas" alternativas para lograr una mejor movilidad entre ambos barrios y expresó su deseo de que las soluciones que se van a proponer "satisfagan las necesidades de los afectados y beneficien el buen funcionamiento del transporte público".
Por su parte, el diputado apuntó que "en ocasiones las grandes infraestructuras de comunicación se encuentran con que sus buenos deseos globales chocan de bruces contra la realidad local". Reconoció que la Z-40 es una obra "largamente demandada que se ha acelerado gracias a la Expo 2008", pero lamentó que vaya a provocar una "ruptura" en los pasos peatonales entre estos dos barrios, "afectando a la calidad de vida de los vecinos".
