Gallardón asegura que el Gobierno "nunca se sentirá tranquilo" mientras exista una víctima enterrada en una cuneta y sus familiares la busquen
MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha enviado a la ONU el informe que le requirió para asistir a las víctimas del franquismo y ha desvelado que el número de llamadas y correos recibidas en el servicio de atención ciudadana por este colectivo se ha reducido en casi un 500 por ciento, pasando de 10.000 en 2010 a 1.316 solicitudes.
Así se ha expresado Gallardón después de que el senador del Grupo Vasco Jokin Bildarratz haya querido saber su opinión sobre el informe del Relator Especial de Naciones Unidas sobre la Promoción de la Verdad, la Justicia, la Reparación y las Garantías de no Repetición, Pablo de Greiff, y del Grupo de Trabajo sobre las Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la ONU a favor de que se investiguen los crímenes del franquismo y se busque a los desaparecidos.
En primer lugar, Gallardón ha felicitado a la nueva portavoz del PSOE en la Cámara Alta María Chivite y le ha deseado "todos los éxitos", mientras que ha dirigido unas palabras para el expresidente de Aragón Marcelino Iglesias, de quien, "sin perjuicio de las discrepancias ideológicas y programáticas", ha elogiado el "elegante estilo con el que siempre ha ejercido sus responsabilidades".
Dicho esto, Gallardón ha afirmado que el Ministerio de Exteriores ya ha trasladado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU el informe sobre el franquismo, después de que la organización le diera un plazo de 90 días para saber las medidas de España.
"NO HAY HERIDA MÁS GRANDE QUE LA GUERRA CIVIL"
Tras abogar por esperar a la respuesta de Naciones Unidas, el ministro ha enfatizado que "no hay herida más grande en este país que nuestra Guerra Civil". "No hay probablemente nada que nos duela más y nos avergüence más y, por eso, tenemos que hacer todo lo que en nuestra mano esté para corregir los efectos de la misma", ha añadido en el Pleno del Senado.
Ha citado los 25 millones de euros destinados a subvencionar a asociaciones de víctimas, los 8,2 millones empleados en la apertura de fosas y la exhumación de cadáveres, el mapa de fosas y el servicio de atención ciudadana que sigue abierto. Como consecuencia de toda esta actuación, se ha reducido el número de peticiones casi en un 500 por ciento.
Gallardón ha discrepado sobre el efecto de la Ley de Amnistía de 1977 que dice tener la ONU, para quien no impide las investigaciones judiciales. Ha recordado que el Grupo Vasco, con una "brillante" intervención de Xabier Arzalluz, votó a favor de esta norma, al tiempo que ha dicho no compartir la propuesta de la ONU de que el Defensor del Pueblo sea elegido por una "especie de sociedad civil" integrada por organizaciones no gubernamentales.
"Este Gobierno nunca se sentirá tranquilo mientras exista una persona enterrada en una cuneta, da igual de qué bando sea en la guerra más incivil de las guerras que es la Guerra Civil, y sus familiares demanden su localización y entierro", ha concluido.
