El PSOE lamenta que Obama llamara a Rajoy el último y el PP contesta que peor era cuando llamaba a Zapatero para hacer recortes
MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha dicho este miércoles que espera que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, no lleve su intervención en la crisis de Crimea a la "catástrofe" que, a su juicio, sería la separación de ésta de Ucrania, país cuya "integridad territorial" y "soberanía" ha respaldado.
"Espero que el presidente ruso no quiera llevar esto a una situación que sería una catástrofe", ha manifestado Morenés durante su comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso, tras lo cual ha insistido en que en esta crisis es "fundamental el respeto a la legislación de cada nación".
Para el ministro, la crisis de Crimea "no se puede arreglar de otra manera que promoviendo el diálogo" y en esto es en lo que ha asegurado que trabaja la UE. "Deseamos y trabajamos por la rápida reducción de la tensión entre las partes y por la búsqueda de una solución negociada respetuosa con el Derecho Internacional y comprometida con la integridad territorial y la soberanía de Ucrania", ha explicado.
En este sentido, ha dejado claro que todo diálogo ha de llevarse a cabo "de igual a igual", de modo que "lo primero" que hay que exigir a Rusia es que abandone su posición de fuerza frente a Ucrania y busque el "equilibrio".
Morenés ha reiterado varias veces que Ucrania "tiene que ser soberano para decidir su futuro" y que sólo en esta línea puede haber "paz, concordia y diálogo". Ésta, ha añadido, es la posición que seguirán manteniendo tanto España, como la UE y Estados Unidos.
AMENAZA PARA LA ESTABILIDAD DE EUROPA
Sobre este asunto también se han manifestado todos los portavoces parlamentarios. El diputado socialista Diego López Garrido ha destacado que la crisis de Crimea está demostrando la "necesidad" de que la UE cuente con una política común de seguridad y defensa porque la situación supone una "amenaza para la estabilidad europea".
A su juicio, la posición que está manteniendo España en esta crisis es de "una gran coherencia", ya que se ha posicionado del mismo modo que lo hizo tras la declaración unilateral de independencia de Kosovo al rechazarla.
Sobre este punto, el ministro ha coincidido con el diputado y ha subrayado que "el tiempo a veces da la razón" y ha remarcado que tanto en el caso de Kosovo como en el de Crimea se ha de imponer "el respeto a la legislación internacional, que pasa por el respeto a la legislación legalmente constituida" de cada país.
No obstante, López Garrido ha lamentado que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamara en último lugar al jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, en su ronda de contactos con los líderes europeos para abordar este asunto.
Frente a esta afirmación, el portavoz del Grupo Popular en la Comisión de Defensa, Vicente Ferrer, ha respondido que siempre será "mejor" que Obama llame a Rajoy "el último", pero que al fin y al cabo se ponga en contacto con él, "y no que le llame para decirle que nuestra economía va a la ruina", en clara referencia a la llamada que realizó el mandatario norteamericano en mayo de 2010 al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero para instarle a tomar medidas para reducir el déficit.
ACTITUD PROPIA DE "REGÍMENES AUTORITARIOS"
Para el diputado del PP, Rusia está aplicando con Ucrania "la política que ya ensayó con Georgia" en la guerra que le enfrentó a este país en el verano de 2008 en defensa de los territorios independentistas de Ostetia del Sur y Abjazia. A su juicio, se trata de una actitud "propia de regímenes autoritarios" y ha advertido de que el "precio" que pagará por ello será "desorbitado" si continúa.
La portavoz de UPyD, Irene Lozano, ha coincidido con el diputado del PSOE al considerar que la crisis de Crimea ha "puesto en evidencia las debilidades" de la política de seguridad y defensa de la UE, pero también de la propia política exterior de España porque nuestro país "tiende a inhibirse" en los conflictos y se suma siempre a la posición europea.
En este sentido, ha señalado que, si bien las capacidades en defensa de la UE deberían ser "superiores" a las de Rusia, en realidad no es así a causa de la "debilidad política" que impera en Europa por la disparidad de posiciones.
DEFENSA "REAL, SÓLIDA Y VIABLE"
No obstante, el ministro ha dejado claro que es "voluntad y propósito" del Gobierno "poner todos los medios y llevar a cabo todos los esfuerzos para concretar una política común de seguridad y defensa real, sólida y viable que comience por el más firme compromiso con la defensa nacional y continúe por la indisolubilidad del vínculo atlántico".
Eso sí, ha reconocido que las conclusiones del Consejo Europeo del pasado diciembre, en el que se abordó el futuro "arranque" de la política común de seguridad y defensa de la UE, no suponen "una revolución, ni un logro fundamental", si bien ha afirmado que sí son "el punto de partida con concreciones y un programa de trabajo serio y ordenado que puede desembocar en la supervivencia de Europa como interlocutor sólido capaz de defender sus intereses, de difundir sus valores y de contribuir al bienestar global".
