El Gobierno prepara la repatriación desde Siria de 13 españoles expatriados

José Manuel García Margallo, Ministro De Asuntos Exteriores
CONGRESO
Actualizado: miércoles, 7 marzo 2012 20:48

MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno prepara la repatriación desde Siria de 13 españoles que trabajan como expatriados allí, según ha anunciado esta tarde en el Senado el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.

Este grupo incluye tanto al personal que trabaja en la Embajada como en la sede del Instituto Cervantes de Damasco, han precisado fuentes diplomáticas.

Tan solo dos diplomáticos de la Embajada permanecerán en Siria, pero trabajarán desde la delegación de la UE en Damasco con el objetivo de seguir prestando asistencia a la colonia española en ese país (en su mayoría ciudadanos hispanosirios fruto de matrimonios mixtos), mantener el contacto con la oposición y seguir recabando información sobre el terreno.

La decisión de repatriar al personal expatriado --salvo los dos funcionarios citados-- responde al anuncio que hizo ayer el ministro de cerrar la Embajada en Siria en "repulsa" por las matanzas perpetradas por el régimen de Bashar el Assad.

Aunque la medida equivale en la práctica a un cierre de la Embajada --en la legación solo quedará el personal local a cargo de su mantenimiento-- formalmente lo que el Gobierno ha hecho es, en lenguaje diplomático, una "suspensión definitiva" de la actividad de la legación.

García-Margallo ha evitado hablar de cierre durante su comparecencia y ha empleado el término "suspensión". El matiz tiene una explicación: si España anunciara formalmente el cierre, no podría mantener en el país a dos funcionarios con su actual estatus diplomático.

Representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación se han entrevistado precisamente este miércoles con el director de operaciones del Servicio Europeo de Acción Exterior, David O'Sullivan, para concretar cómo se van a integrar los dos diplomáticos españoles en su delegación en Damasco, en la que actualmente trabajan cinco diplomáticos europeos.

La permanencia de estos dos diplomáticos españoles en Siria impedirá al Gobierno de Mariano Rajoy optar por la expulsión del embajador sirio en Madrid, ya que Damasco respondería automáticamente con la expulsión de los funcionarios españoles.

En su intervención, García-Margallo ha alertado de que Siria representa un "escenario peligroso", con la posibilidad de que se inicie una guerra que puede ser "relativamente larga".

Tras recordar que una intervención militar extranjera "sin el paraguas de la ONU" sería optar por la vía que se tomó con la guerra de Irak en 2004, ha llamado la atención sobre el hecho de que Bashir el Assad cuenta "con cierto apoyo popular" procedente sobre todo de las minorías en ese país, como la alauí, actualmente al frente de las instituciones, sin olvidar el respaldo de Irán.

En el turno de portavoces, el senador del PNV Iñaki Anasagasti ha considerado una "buena señal" el cierre de la embajada, mientras que el representante del PSC Joan Sabaté ha cuestionado que esta medida sea la más adecuada para favorecer una solución diplomática al conflicto.