Gobierno vasco "hará más efectivas" las medidas de seguridad de sedes judiciales y llama a extremar la autoprotección

Actualizado: sábado, 27 junio 2009 12:39

Fínez asegura que no darán "un paso atrás" en la euskaldunización de la Justicia y procurarán fomentar el bilingüismo

BILBAO, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -

El nuevo viceconsejero de Justicia, José Manuel Fínez, afirmó hoy que el Gobierno vasco "hará más efectivas" las medidas de seguridad en las sedes judiciales y realizó un llamamiento a extremar la autoprotección. Además, aseguró que el Ejecutivo no dará "un paso atrás" en la euskaldunización de la Justicia y procurará fomentar el bilingüismo.

En una entrevista concedida a Europa Press, Fínez manifestó que el Departamento de Justicia del Gobierno vasco facilitará al "máximo" la labor de la Judicatura y consideró que es "doloroso" que todavía haya que recordar que los jueces que trabajan en Euskadi "son nuestros jueces".

El viceconsejero aseguró que el Gobierno vasco "hace tiempo que está comprometido con la seguridad" de los miembros de la carrera judicial y subrayó que, en estos momentos, el Ejecutivo tiene que "evaluar individualizadamente cada una de las situaciones para adoptar las medidas que sean necesarias encaminadas a la adecuada protección de los jueces", tal como se comprometió el consejero del Interior, Rodolfo Ares, con la Sala de Gobierno el 28 de mayo.

Asimismo, se refirió a la seguridad de los edificios judiciales y los palacios de Justicia de las capitales vascas y señaló que, probablemente, la próxima semana los representantes del Departamento de Justicia y del órgano de Gobierno de los jueces se reunirán de nuevo para analizar esta cuestión.

Tras recordar que ya trasladaron el 12 de este mes a los miembros de la Judicatura un borrador con las propuestas de protección de las sedes judiciales, afirmó que la apuesta del Ejecutivo por "reforzar" la seguridad "no quiere decir que haya medidas distintas, sino que hay que hacerlas más efectivas".

Además, destacó que "hay unos protocolos necesarios de seguridad en el interior de los edificios, encaminados a la protección personal, que hay que observar sin bajar la guardia en ningún momento".

"En época en la que no hay atentados, al menos de forma manifiesta y patente, todos solemos bajar la guardia. Desgraciadamente, la banda terrorista nos ha recordado que no ha hecho dejación de lo que viene haciendo hace mucho tiempo, que está en esa actitud y en ese comportamiento y que, por lo tanto, hay que extremar esas medidas", apuntó.

José Manuel Fínez subrayó que no le consta que se haya creado "una especial inquietud" en el colectivo judicial tras el asesinato el pasado 19 de junio del inspector de la Policía Nacional, Eduardo Puelles, pero sí "una preocupación por extremar las medidas personales de vigilancia".

"Y eso quiere decir no volver a las rutinas, cambiar los itinerarios y ser cautos en los recorridos, es decir, todas aquellas medidas de carácter personal, al margen de las medidas que, desde el exterior, se les puedan ofrecer y se les pongan para garantizar su seguridad", añadió.

En esta línea, apuntó que "el Gobierno vasco considera muy importantes estas medidas de autoprotección" porque, "si no se cumplen", las iniciativas externas que se adopten "van a ser, en gran parte, ineficaces porque la efectiva protección empieza por la autoprotección".

EUSKERA

Fínez afirmó que el Ejecutivo autónomo "ha hecho un gran esfuerzo" en favor de la implantación del euskera en la Administración de Justicia, y aseveró que su Departamento "no va a dar un paso atrás en el proceso ni en los planes de euskaldunización". "Pero, sin dar un paso atrás, lo que sí vamos a procurar es que se haga efectivo el bilingüismo", indicó.

En este sentido, precisó que "el gran reto que tiene la Administración de Justicia es que un ciudadano que formula su demanda o su petición a la Administración en euskera pueda obtener una respuesta judicial" en lengua vasca.

"Y eso pasa por acomodar los sistemas de la nueva oficina judicial, pero pasa también por los planes de formación al margen de adecuada preparación o euskaldunización de los funcionarios", añadió.

RELACIÓN INSTITUCIONAL

El viceconsejero de Justicia apostó por "normalizar la relación institucional" entre el Gobierno vasco y, en concreto, la de su Departamento con la sala de Gobierno del TSJPV, después de que ésta fuera "tensa y difícil" con el anterior Ejecutivo.

A su juicio, en la precedente legislatura "no hubo un interés por legitimar" a los representantes de la Judicatura. En esta línea, dijo que no cree que se pueda decir "tanto como que se deslegitimara" a los jueces, "pero que no se hizo el esfuerzo o, al menos, no se manifestó o no se palpó el esfuerzo por legitimar nuestras instituciones judiciales". "Eso no lo percibimos y ahora casi hablo ya como juez", apuntó.

Para José Manuel Fínez, con el Ejecutivo de Ibarretxe "se creó un clima de confrontación que no beneficiaba a nadie" y consideró que "hubo pequeñas intromisiones por ambas partes que hay que ir resolviendo y limando".

Tras asegurar que "no puede haber una incomunicación de forma continuada" porque "hay que sentarse y resolver los problemas de la Administración de Justicia en Euskadi", dijo que, en la actualidad, "hay muy buena disposición por parte de los jueces y, por lo tanto, se trata de, salvando las diferencias y discrepancias a la hora de abordar los problemas, poder llegar a acuerdos muy importantes".

"NUESTROS JUECES"

En este sentido, abogó por reivindicar que los jueces que desarrollan sus funciones en Euskadi "son nuestros jueces y lo primero que tiene que garantizar un Gobierno autonómico es la legitimidad social y política del sistema de Justicia de nuestra Comunidad Autónoma". "Estos no son 'los jueces españoles o de España', sino que son nuestros jueces", apuntó, en referencia a las expresiones manifestadas por algunos sectores de la sociedad vasca.

El número dos del Departamento de Justicia dijo que, "a partir de ahí", se puede hablar "de cómo se configura el sistema de Justicia, de cómo se adapta al marco autonómico y de cómo se va desarrollando autonómicamente".

Asimismo, mostró su compromiso de garantizar "su estabilidad y de mantener una relación institucional normalizada" porque los jueces no son "una fuerza ajena o exterior al propio Gobierno autónomo, están plenamente legitimados, forman parte del entramado institucional y son nuestros jueces, a quienes nos debemos", por lo que abogó por "facilitar en lo máximo su labor jurisdiccional".

"Lo que me duele de esto es que lo tenga que decir. Lo doloroso es tener que decir, a estas alturas, que éstos son nuestros jueces, que no son unos extraños ni ajenos. ¿Qué podemos discutir sentencias?. Claro que sí, y eso no les duele a los jueces, lo que les duele es ser excluidos del sistema y no ser valorados como tales".