Golpe de Estado del 23F de 1981 en España: así lo contó Europa Press hace 39 años

Fernando Tejero en el golpe de Estado del 23F
Fernando Tejero en el golpe de Estado del 23F - EUROPA PRESS - Archivo
Actualizado: sábado, 22 febrero 2020 23:30

MADRID, 23 Feb. (EDIZIONES)

El 23 de febrero de 1981 Europa Press estuvo al pie de la noticia para informar de todo lo relacionado con el golpe de Estado frustrado en el Parlamento español. Esta especial cobertura informativa dio lugar a primicias y exclusivas, a graves momentos de tensión y también a anécdotas curiosas e incluso divertidas.

Así lo recoge el libro 'De Europa a Europa', que narra la historia de la agencia de noticias desde su fundación en 1953 hasta 1986. Jesús Frías, que fue redactor jefe de Europa Press, dedica un capítulo entero a este acontecimiento: 'El 23-F, prueba de fuego para el Rey y la democracia', y más páginas para todos los hechos anteriores y posteriores relacionados con la intentona.

En el momento en que el teniente coronel Antonio Tejero y el grupo de guardias civiles que le acompañaban irrumpió en el hemiciclo (las 18:23 horas), Jesús María Zuloaga y Mariano González eran los redactores de Europa Press que cubrían la sesión de investidura a Calvo-Sotelo desde la tribuna de prensa del Congreso. Zuloaga recuerda así estos angustiosos primeros minutos en los que los asaltantes abrieron fuego.

"Poco antes de las seis y media oímos un golpe seco. Yo, que había hecho la mili, me di cuenta de que era un disparo. Iba a salir a ver qué ocurría cuando vi por el pasillo de la izquierda de la tribuna cómo un guardia civil con un subfusil en sus manos venía corriendo y gritando '¡métete adentro, rápido adentro!' Entré, y detrás de mí lo hizo el guardia".

"Enseguida escuchamos más disparos y gritos de '¡al suelo, al suelo!', así que nos lanzamos cuerpo a tierra. Este guardia, al que apodaban 'El Chino', estuvo a punto de caer desde la tribuna de prensa hasta los asientos de los diputados en el piso inferior, porque se puso de pie en el borde de la barandilla al tiempo que realizaba varios disparos al techo, que provocaron la caída de cascotes".

"CREÍ QUE ERAN ETARRAS DISFRAZADOS"

"Estuvimos bastante rato en el suelo y pasamos miedo porque no sabíamos qué estaba sucediendo en realidad. En esos primeros momentos creí que no eran guardias civiles los que habían entrado, sino etarras disfrazados. Recordaba que se habían producido acciones terroristas en otros países, en los que los guerrilleros se habían disfrazado de policías o de militares para asaltar alguna institución o un polvorín, y creí que era un hecho así. En ese momento me acordé de mi familia, de mi mujer, de mis hijos..."

Zuloaga sigue contando que oyó una voz que luego supo que era la de Tejero, que gritó: "¡Alto el fuego, que vais a dar a los nuestros!". 'El Chino', al ver lo asustados que estaban los periodistas, les intentaba tranquilizar diciendo: "No se preocupen, que nosotros no vamos contra ustedes, sino contra el Sistema, y ustedes no son del Sistema, ¿verdad? ¿Alguno de ustedes es del Sistema?" A lo que todos los interpelados contestaban: "No, no". "Pues entonces no hay nada que temer", remataba el guardia.

Los periodistas presentes en la tribuna de prensa llegaron a la conclusión de que era un golpe de Estado cuando identificaron a Tejero. "Mirando por unas rendijas de la barandilla" vieron "que en la presidencia del hemiciclo estaba un guardia civil con bigotes que alguno identificó, diciendo por lo bajo: 'Es el teniente coronel Tejero, el de la Operación Galaxia' (un plan golpista previsto para el 17 de noviembre de 1978 por el que se juzgó y condenó al propio Tejero y al capitán de la Policía Armada Ricardo Sáenz de Ynestrillas). La conclusión en la tribuna de prensa fue clara y sencilla: si estaba Tejero implicado, era un golpe de Estado, no había duda".

Zuloaga narra cómo algunos periodistas tenían especiales motivos de temor: "Cuando nos encontrábamos en el suelo, dos periodistas que estaban allí y que pertenecían al Partido Comunista comenzaron a levantar con las uñas de las manos el sintasol del suelo y metían por la ranura los carnés que les acreditaban como miembros de Comisiones Obreras y del Partido Comunista".

El redactor de Europa Pres añade: "Me dio la impresión de que aquello no estaba muy bien organizado, porque en un momento determinado, pasada más o menos una hora, aquel guardia que nos había estado vigilando durante ese tiempo desapareció de allí y nos dejó solos. Yo entonces salí de la tribuna de prensa y me puse a buscar un teléfono para poder llamar a la agencia y decir lo que estaba ocurriendo. Y, sobre todo, para que supieran que estábamos vivos. Bajé a la sala de prensa, donde estaba funcionando un teletipo, que era el de Europa Press (el Congreso tenía contratado el Servicio de Noticias) y ya vi que se había dado algo del asalto al Congreso".

TEJERO CON UN TELETIPO DE EUROPA PRESS: "¿QUIÉN HA ESCRITO ESTO?"

En un momento dado Tejero permitió salir a los periodistas que quisieran abandonar el edificio y entre los dos redactores de Europa Press decidieron que Mariano González se fuera a la agencia a escribir lo que había pasado, mientras Jesús María Zuloaga se quedaba dentro del Congreso para seguir el desarrollo de los acontecimientos. "Mariano González llegó a la agencia y escribió una noticia completísima de todo lo ocurrido. Cuando salió esa noticia por el teletipo del Congreso, uno de los guardias se la dio a Tejero, la leyó y le vimos caminar con el texto de la información en la mano, diciendo airado: '¿Quién ha escrito esto?' Subí otra vez a la tribuna de prensa y, en aquel momento, Tejero advirtió a los guardias que les podían cortar la luz desde fuera, por lo que empezaron a rajar algunas sillas para hacer una hoguera e iluminar aquello, si era preciso".

Europa Press fue la primera agencia que dio por teletipo el bando del teniente general Milans del Bosch, uno de los cabecillas del golpe que llegó sacar los tanques a las calles de Valencia. El texto del bando lo había recibido el periodista Luis Herrero, entonces director del periódico 'Mediterráneo' de Castellón, después de que dos efectivos de la Policía Militar armados con ametralladoras lo entregaran, en un sobre, en la sede del diario, tal y como relata el propio Luis Herrero en su libro 'Los que le llamábamos Adolfo'.

Luis Herrero cogió el teléfono, llamó a Europa Press y pidió que le pusieran con Antonio Herrero Losada, que era el director de la agencia y, además, el padre de Antonio Herrero Lima, íntimo amigo de Luis. Según relata Luis Herrero en su libro: "Le dije que acababa de recibir en el periódico el bando de Milans. Con gran excitación periodística me pidió que se lo dictara. Al poco tiempo, la agencia lo repicó a todos sus abonados, entre los que estaba el Congreso de los Diputados. No mucho después, el capitán Muñecas se dirigió a los diputados y les dijo en voz alta: 'La agencia Europa Press acaba de transmitir la siguiente noticia...' y leyó el comunicado que yo le había dictado a Antonio Herrero".

En ese momento se produjo una anécdota 'divertida' con ese teletipo. Zuloaga recuerda que "como se ve que la moral empezaba a bajar entre los guardias civiles que habían asaltado el Congreso, porque empezaron a cuestionarse lo que estaban haciendo", Tejero le dio a uno de ellos el teletipo que informaba de que Milans del Bosch había sacado los tanques en Valencia y había hecho pública una proclama. "Pero en la tira de papel que Tejero había arrancado había otras noticias nuestras, y una de ellas decía que había normalidad en el Cuartel General del Ejército y en las calles de Madrid. El guardia civil, desde la tribuna, leía a los asaltantes, y al mismo tiempo a los diputados: 'Normalidad en el Cuartel General del Ejército. Madrid, 23, Europa Press. Un redactor de Europa Press ha podido comprobar que en el Cuartel General del Ejército hay una normalidad absoluta...' Entonces sube rápidamente un capitán al estrado, le arranca al guardia civil el papel de las manos y le dice airado: 'Eso no, eso no', y le pide que no lea lo que les es desfavorable. Le da de nuevo los papeles y le dice que lea solo la noticia del bando de Milans del Bosch. Y el guardia civil así lo hace: 'Bando del capitán general Milans del Bosch. Madrid, 23, Europa Press...'".

Zuloaga estuvo dentro del Congreso hasta las 22:30 horas aproximadamente, cuando Tejero expulsó a todos los periodistas.

LA PRIMERA REACCIÓN DEL REY Y ENTREVISTA EN EXCLUSIVA CON TEJERO

Europa Press fue también el primer medio que informó de una reacción del Rey Juan Carlos I respecto al golpe de Estado. "Tranquilo, Jordi, tranquilo" fue la frase, que se hizo famosa, que el monarca transmitió al entonces presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, cuando este le telefoneó. Así se lo comunicó el propio Pujol a cuatro o cinco periodistas que en ese momento habían acudido a la sede del gobierno catalán, entre ellos el redactor de Europa Press Daniel Arasa.

Otra curiosa exclusiva que consiguió Europa Press en 'la noche de los transistores' fue entrevistar a Antonio Tejero mientras este se encontraba en el Congreso. Juan García Carrés, dirigente del Sindicato Vertical que luego fue condenado por el 23-F, se prestó a facilitar el contacto, señalando un teléfono del Congreso que estaba siendo utilizado por Tejero.

Fue el redactor Pedro Sorela el encargado de hacerle las preguntas y recoger sus declaraciones. Al principio Sorela le llama unas veces 'teniente' y otras 'coronel', lo que provoca que el golpista responda abruptamente que él es 'teniente coronel'. Luego el periodista le pregunta qué ha pretendido al asaltar el Congreso y Tejero contesta que establece una serie de condiciones para abandonar el Parlamento y dejar libres al Gobierno y a los diputados retenidos. Entre estas condiciones figuraban la constitución de una Junta Militar en España para erradicar el terrorismo y la disolución del Parlamento.

Después del 23-F vino el juicio por el 23-F, del que Europa Press también informó con rigurosidad, consiguiendo más éxitos informativos. Clave para ello fue que el redactor de Tribunales, José Yoldi, consiguiera una copia del sumario entero, que en aquel momento era secreto. El propio Yoldi y Vicente Clavero fueron los redactores que cubrieron todas las sesiones del juicio, que fueron largas y complejas.

Se cumplen ahora 39 años de aquel capítulo trascendental para la historia reciente de España, en el que no faltó, como aquí se ha visto, la información de Europa Press.