La residencia no está conectada a la red eléctrica y las instalaciones funcionan mediante un generador
PALMA DE MALLORCA, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El anterior Govern presidido por Jaume Matas inauguró el pasado mes de enero la residencia de Inca sin haber obtenido los permisos correspondientes para su puesta en funcionamiento, ya que cuando el centro comenzó a trabajar, carecía de licencia de final de obras y de la comunicación de la apertura de actividades como centro de trabajo, entre otros permisos.
Así se desprende del informe técnico encargado por la Conselleria de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración encargado a la Fundación Balear de Atención y Apoyo a la Dependencia sobre la situación del centro, tras las quejas y denuncias expuestas por familiares de los usuarios preocupados por sus condiciones.
Según el informe, cuando el entonces presidente del Ejecutivo, Jaume Matas, y el alcalde de Inca, Pere Rotger, inauguraron la residencia, ésta carecía de la licencia de instalaciones, de los permisos de apertura y funcionamiento, del certificado de final de obras, de la cédula de habitabilidad, de la comunicación de apertura como centro de trabajo y de la autorización previa.
Desde el Govern informaron que el centro actualmente carece de ningún permiso y advirtieron que una de las principales consecuencias de esta situación es que la residencia no está conectada a la red eléctrica y depende de un generador que no produce la suficiente energía para el funcionamiento del servicio en condiciones.
En este sentido, la primera actuación de la Conselleria será frenar la entrada de nuevos ingresos en el centro, mientras el Ayuntamiento y la empresa encargada de la gestión resuelven los problemas.
Asimismo, la Conselleria informó que se ha puesto en contacto con la empresa, que señaló que la residencia se inauguró sin ningún tipo de permiso y se tuvo que abrir "por presiones políticas". En este sentido, desde la Conselleria informaron que puso también en contacto con el alcalde de Inca, quien manifestó su voluntad por "colaborar" agilizando los los asuntos pendientes que dependan del Consistorio.
Además de la residencia de Inca, el Govern explicó que hay otros centros que se han construido con la misma fórmula y que no se pondrán en marcha, "aunque estén acabados", hasta que no tengan los permisos pertinentes con la finalidad de evitar problemas como los que se han producido en Inca.
A fin de terminar con el problema de la residencia, la Conselleria ha dado un término a la empresa para que solucione las deficiencias, ya que, en caso contrario, se vería obligada a llegar a un acuerdo con las familias para trasladar a los residentes a otros centros "en medida de las posibilidades".
