Ibarra coincide con Rafael Vera en un acto en Cáceres y le define como "un ciudadano honorable"

Actualizado: jueves, 26 abril 2007 21:18

Ibarra augura los titulares: "Vera viaja a Extremadura para que su amigo Ibarra le deje un despacho para un atentado de los islamistas"

NAVALMORAL DE LA MATA (CÁCERES), 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ex secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, acompañó hoy al presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, a un acto con discapacitados. Ibarra definió a Vera como un "ciudadano honorable".

En el acto estuvo presente el ex secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, que acudió invitado por el presidente de la asociación, al igual que el ex presidente del Gobierno, Felipe González, quien finalmente no pudo asistir porque, según las palabras del propio Rodríguez Ibarra, "le han roto la mandíbula para sacarle unas muelas del juicio".

El presidente de la Junta de Extremadura especuló con los titulares de algunos confidenciales tras el acto de hoy: "Felipe González con la mandíbula rota, y Rafael Vera viaja a Extremadura para que su amigo Rodríguez Ibarra le deje un despacho para un atentado de los islamistas". Ibarra definió a Rafael Vera como un "ciudadano honorable" y aseguró que su presencia en el acto "no tiene ninguna importancia".

LLAMAMIENTO A LOS DISCAPACITADOS

El jefe del Ejecutivo extremeño hizo hoy un llamamiento a las personas con discapacidad de la comunidad autónoma para que se inscriban como demandantes de empleo, y en este sentido elogió el trabajo realizado por la Asociación de Minusválidos Campo Arañuelo (AMCA).

Según destacó Ibarra en la inauguración de las nuevas instalaciones de este colectivo, si se conociera más la labor de asociaciones de este tipo habría "más gente, más familias" de personas con discapacidad "que se animaría" a entrar en el mercado laboral.

Juan Carlos Rodríguez Ibarra puso de manifiesto que desde 1995, año en el que la Junta de Extremadura recibió las competencias en trabajo, el número de centros especiales de empleo ha aumentado de 18 a 148, y de 428 trabajadores discapacitados se ha pasado a 1.396 trabajadores.

Ibarra se refirió a la "satisfacción" que le produce que aumente el número de demandantes de empleo en la comunidad autónoma, pero sobre todo comprobar que "en el mundo de la discapacidad, cada vez hay más gente que quiere trabajar". Así, dijo que se entra en un proceso en el que "gente que antes pensaba que este mundo estaba vetado para ellos" comienza a tener interés por entrar en el mercado laboral.

Pese al aumento en los últimos años, la cifra de discapacitados extremeños que aún no se ha planteado trabajar es alta según Ibarra, ya que es del 72 por ciento, porque según el presidente piensan "que las cosas son como antes", cuando "se les tenía ocultos" porque la sociedad pensaba que "eran fruto del pecado", una visión que ha cambiado ya que hoy se piensa según Ibarra que eso "es fruto del amor".

Por ello, el presidente de la Junta de Extremadura retó al presidente de AMCA y a la asociación a que "todo aquél que no haya pensado en la posibilidad de trabajar lo piense" y se apunte como demandante de empleo. Al respecto, dijo que se sentirá "satisfecho" de que las listas del paro suban debido a que estas personas acuden a las oficinas del Servicio Extremeño Público de Empleo (SEXPE) para inscribirse como demandantes.

Rodríguez Ibarra compartió con los presentes que desde hace algo más de un año, cuando sufrió un "accidente" cardiovascular, comprende mejor la vida de las personas con discapacidad. Al respecto, explicó que al acudir a algunos restaurantes el camarero le sirve la comida con poca sal.

Entonces, le llama la atención y le dice "esto está soso", a lo que el empleado le responde "es que como usted..." en referencia al infarto. Sin embargo, el presidente señaló que el único hábito que ha cambiado es el del tabaco, que lo ha dejado.

AMCA

Las nuevas instalaciones de AMCA en Navalmoral de la Mata se ubican en una superficie de 300 metros cuadrados divididos en tres despachos, una sala de juntas, una sala de rehabilitación, un aula de formación, dos aseos, dos vestuarios y un almacén.

AMCA cuenta con más de un centenar de trabajadoras, todas ellas con algún tipo de discapacidad, según el presidente de la institución, Antonio Redondo, tanto en el servicio de transporte de la asociación como en la manipulación y montaje de material sanitario. En total, la asociación cuenta aproximadamente con 1.200 socios.