Iceta dice que le pidió "un funeral sencillo" y sabía que vivía "los últimos compases de su peregrinación"

Actualizado: jueves, 20 marzo 2014 23:52

BILBAO, 2O (EUROPA PRESS)

El obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha destacado que Iñaki Azkuna le pidió un "funeral sencillo" y ha añadido que el sabía que vivía "los últimos compases de su peregrinacion".

En un comunicado, ha manifestado su afecto y condolencias a la familia y allegados de Azkuna "en estos momentos de dolor". "Elevamos a Dios nuestra oración por su eterno descanso...", ha agregado.

Iceta, tras recordar la "lucha con todas sus fuerzas" que llevó el alcalde de Bilbao contra el cáncer, ha destacado que fue alcalde de Bilbao durante 15 años "motor de la gran transformación de la villa".

El obispo ha subrayado que, entre otros reconocimientos, logró el galardón como "mejor alcalde del mundo" recibido los últimos años y ha recordado los últimos momentos que pasó junto a él.

Iceta ha indicado que, a lo largo de los últimos años, el alcalde ha mantenido una "estrecha" relación personal tanto con él como con el anterior obispo, monseñor Ricardo Blázquez.

El obispo ha destacado lo que Iñaki Azkuna ha supuesto para quienes lo han conocido y tratado, y para los habitantes de Bilbao "que han sentido un alcalde cercano, con profundas convicciones, respetuoso con todos, con su trabajo a pie de calle, sensible a las necesidades cotidianas y a la proyección de futuro de nuestra querida villa".

También ha remarcado su fe y, en este sentido, ha señalado que era "conocido por todos su profundo amor a la Virgen que repetidamente ha mostrado de mil maneras". Iceta ha indicado que, como obispo de Bilbao, siempre ha recibido de él "multitud de detalles de afecto, de sencillez y cercanía".

"PROFUNDA Y CONMOVEDORA CONVERSACIÓN"

En este sentido, ha recordado que, en la última visita que le realizó a su domicilio, donde mantuvieron "una profunda y conmovedora conversación".

Según ha destacado, como médico, era "plenamente consciente" de su situación y de que estaba viviendo "los últimos compases de su peregrinación en este mundo".

"Él sabía que marchaba a la casa del Padre y, como me manifestó, quiso despedirse de su obispo. Me confesó que, aunque desde nacimiento había profesado la fe, vivida en su Durango natal, posteriormente tuvo un periodo de unos veinte años en los que vivió de modo un tanto distante de sus convicciones cristianas. Mirando a una hermosa imagen de Cristo que tenía ante su cama me dijo: 'Ese salió a buscarme, me encontró y me llamó. Y desde entonces ni Él me ha dejado a mi, ni yo a Él'", ha agregado.

Según ha indicado, es una "hermosa expresión de la experiencia que inicia un recorrido nuevo en la vida, de una peregrinación fundamentada en una compañía". "Un camino que fue ganando profundidad, una hermosa evolución espiritual de crecimiento en la experiencia de fe", ha añadido.

El obispo ha señalado que el alcalde aceptó "con paz su enfermedad" y que no hubo, por su parte, "ningún reproche, sino, al contrario, plena confianza en la providencia de Dios y aceptación y ofrecimiento de ser consciente de que la meta de su peregrinación estaba cercana". "Me decía, 'mira, no voy a hacer tonterías al final de mi vida, me pongo en manos de Dios. Lo vivo con paz'", ha agregado.

Iceta ha señalado que en su última conversación hablaron "de muchas cosas" y le pidió "un funeral sencillo". "Que la gente sencilla de Bilbao pudiera acompañarle y estar cerca,-ha explicado Iceta- Esa gente, a la que ha querido servir y a la que constantemente ha querido acercarse y escuchar.

El afecto de los habitantes de Bilbao era patente cuando se estaba con él. Personas de toda condición se acercaban a saludarle, a pedirle cosas para su barrio, a quejarse de lo que no iba bien, incluso alguna señora se atrevía a lanzarle piropos, uno ha visto de todo. Pero en toda ocasión con afecto y respeto".

El obispo ha añadido que el alcalde iba "siempre de frente" y no le gustaban las "medias tintas ni los rodeos" y ha indicado que le manifestó su alegría de pertenecer a la Iglesia. "'A veces no la entiendo, pero soy hijo de la Iglesia y estoy muy contento de ello. Por eso te he llamado, como pastor de esta Iglesia de Bilbao y obispo mío que eres. Quería despedirme de ti'", ha desvelado.