SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Nov.(EUROPA PRESS)
El internamiento de los menores que supuestamente participaron en una pelea en Boiro (A Coruña); el presunto agresor y el que grabó el suceso, pudo ser "una medida precipitada" por la presión mediática, puesto que existen otras "alternativas de reeducación" para estos casos, según un psicólogo y experto en este tipo de conflictos.
En declaraciones a Europa Press, este especialista lamentó que "la presión mediática" pudo haber precipitado la decisión de internar a los menores en un centro, "opción que debería ser la última" que se baraje, ya que recordó que la investigación sobre el caso -que debe tener en cuenta las circunstancias familiares y del entorno social, entre otros factores-, se hizo en un tiempo "muy corto".
Al respecto, atribuyó al uso del teléfono móvil la "repercusión" de este suceso, que reconoció que "ocurre muy a menudo" aunque "sin tanta difusión". De hecho, aseguró que la zona donde ocurrió la pelea constituye un lugar "conflictivo" y en el que este caso "se repite a menudo", por lo que "no se debe criminalizar este caso" sino "profundizar en las circunstancias del entorno".
ALTERNATIVAS:SERVICIOS A LA COMUNIDAD.
Los dos menores ingresaron la tarde del viernes en un centro de A Coruña después de que el Juzgado de Menores decidiese el internamiento en régimen abierto de los chicos. Según la legislación vigente, esto supone que el menor debe residir en el centro de reeducación y participar en las actividades escolares o prelaborales dentro del mismo.
El experto mencionó otras opciones como posibles para no internar a los menores, como la libertad vigilada, la semiconvivencia o tareas de servicio a la comunidad, que también tienen fines "reeducativos" y "no condenatorios".
La Fiscalía de Menores, que tiene atribuidas la defensa de los derechos que las leyes reconocen a los menores y la vigilancia de las actuaciones que deban efectuarse en su interés, solicitó el internamiento, que fue decretado en función de "la problemática personal del menor" -el presunto agresor- y las "circunstancias del caso", y tras conocer las consideraciones del equipo técnico al servicio de la Justicia de Menores.
Precisamente, el fiscal portavoz de la Fiscalía del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), José Piñol Rodríguez, subrayó a Europa Press que, dependiendo de las declaraciones se determinan medidas de protección para la víctima y también para el supuesto agresor, con la finalidad de "arroparlo" ante posibles represalias de familiares o amigos de la víctima. En este contexto, los dos menores ingresaron en el centro de reeducación.
En este caso, no obstante, "no parece que fuese el interés supremo del menor" el que primase a la hora de decretar el ingreso, aunque las fuentes consultadas por Europa Pres. reconocen que cabe la posibilidad de que se determinase como medida cautelar.
INVESTIGACION: NO SE BUSCAN A ADULTOS.
Por su parte, la Guardia Civil, que investiga el caso, negó hoy a Europa Press que "se esté buscando la implicación de adultos" en la pelea, aunque sí la presencia de otros menores que probablemente "jaleaban" al agresor.
Estas fuentes rechazaron que "se siga la pista de ningún adulto" y subrayaron que la investigación trata de determinar qué menores estaban en el lugar de los hechos, entre los que se sabe que "había alguna joven" por las voces que se escuchan en el video.
Asimismo, la Fiscalía del Alto tribunal gallego continuará con las indagaciones para aclarar todos los hechos, así como la participación (y en qué grado) de otras posibles personas.
La explicación de la Fiscalía sobre los hechos remite al pasado día 22 de octubre, cuanto un menor "procedió a agredir a otro de forma reiterada y brutal" en el muelle de Escarabote, en Boiro.
Los datos de los que dispone este organismo se refieren a que la agresión "pudo deberse a un propósito de vengar un previo enfrentamiento que la víctima había tenido con un hermano menor" de ese adolescente.
