ROTA (CÁDIZ), 24 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, hizo hoy un llamamiento para que no se le dé "de manera artificial" una dimensión militar al "conflicto" generado por la llegada masiva de cayucos a las Islas Canarias procedentes de las costas africanas, al tiempo que consideró "muy discutible" el poder de "disuasión" de la Armada ante la entrada de las embarcaciones con inmigrantes indocumentados, que están dispuestos a arriesgar su vida por alcanzar territorio español.
"No convirtamos algo que no es de naturaleza militar de una manera artificial en algo que pudiera visualmente y simbólicamente adquirir esa dimensión o esa naturaleza porque nos estaríamos equivocando muy seriamente", indicó, en rueda de prensa a bordo del portaaeronaves de la Armada 'Príncipe de Asturias', al ser preguntado por el modo en que España coordinará el dispositivo aeronaval militar destacado en el archipiélago con los medios que destinará a la zona la Unión Europea.
El ministro afirmó que el trabajo de las Fuerzas Armadas no es controlar los flujos migratorios, tarea que es competencia del Ministerio del Interior, sino socorrer a las personas en situación de riesgo en el mar y subrayó que la contribución de la Armada y del Ejército del Aire en Canarias se enmarca en la "tarea global" del Gobierno español para frenar la llegada masiva de inmigrantes.
Tras ello, aseguró que la Armada puede tener una función "disuasoria" en sus patrullas marítimas pero incidió en que "es muy discutible" ese poder de disuasión ante la entrada de 'cayucos', que trasladan a personas "prácticamente dispuestas a cualquier cosa" incluyendo arriesgar su vida.
El titular de Defensa realizó estas declaraciones en el portaaeronaves español, que navegaba a unos 35 kilómetros de la costa gaditana, tras presenciar una demostración aeronaval en la que fue su primera visita a una unidad militar en territorio español.
Acompañado por el jefe del Estado Mayor de la Armada, almirante general Sebastián Zaragoza Soto, el jefe de la Flota, almirante Angel Tello Valero, y el comandante del buque, capitán de Navío Fernando de Querol Pagán, Alonso presenció el despegue y aterrizaje vertical de seis cazabombarderos 'Harrier', el desembarco de infantes de Marina desde un helicóptero SeaHawk y varias 'pasadas' de las fragatas 'Navarra' y 'Santa María'.
El ministro llegó desde la Base Naval de Rota (Cádiz) a bordo de un helicóptero Bell 212 de la flotilla de la Armada. Recibió los honores y, tras el himno de España, pasó revista a la tripulación del buque. Alonso observó sus primeras maniobras en alta mar y departió con los mandos y la tripulación del 'Príncipe de Asturias'. Finalmente, tras anunciar que Defensa da luz verde a la construcción de la quinta fragata de la serie F-100 y de cuatro buques de acción marítima, Alonso inició el regresó a Madrid previa escala en la Base de Rota.
