MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, cifró en un 20 por ciento el descenso de la delincuencia en la comarca de El Garraf (Barcelona) de junio a agosto como consecuencia de las medidas tomadas tras los asaltos a chalés y la sensación de inseguridad ciudadana de la primavera pasada.
Camacho recordó que el Ministerio de Interior envió a 616 miembros de la Guardia Civil a Cataluña y que se ha reforzado la prevención e investigación de delitos. Añadió que el resultado es un descenso de los delitos de junio a agosto tanto en esa comarca barcelonesa como en la provincia de Tarragona, del 6,5 por ciento, en este segundo caso.
De enero a agosto, sin embargo, la delincuencia en El Garraf arroja un crecimiento del 6,01 por ciento respecto a 2005, aunque Camacho matizó que se ha producido en cuatro municipios pequeños (Canyelles, Cubelles, Olivella y Sant Pere de Ribes) y no en los grandes, como Sitges y Vilanova i la Geltrú. En cuanto a la provincia de Tarragona, el descenso hasta agosto es del 1,7 por ciento, salvo en las zonas del Alt y el Baix Camp.
Camacho ofreció estos datos durante su comparecencia en la comisión de Interior del Senado a petición de CiU, grupo que le pedía explicaciones sobre la delincuencia en Cataluña. El secretario de Estado ofreció las cifras de las zonas de Barcelona y Tarragona en las que trabajan la Guardia Civil y la Policía Nacional, puesto que el resto es competencia de los Mossos d'Esquadra.
El secretario de Estado expuso que "los datos de criminalidad en Cataluña, los datos objetivos, no reflejan en absoluto una realidad que pueda calificarse de especialmente insegura". Señaló que los asaltos a chalés, sobre todo en abril y en mayo, produjeron alarma, pero aseguró que tampoco en este capítulo los números han crecido "sustancialmente": en Barcelona se han producido hasta agosto 11 casos y en Tarragona, 7, cifras parecidas a las de años anteriores, aseguró Antonio Camacho.
"Espero que las buenas estadísticas vayan acompañadas en el futuro por el convencimiento de la gente", le dijo el senador de CiU Lluis Badía, quien también aseguró que existe un problema de coordinación entre la Generalitat y el Gobierno central en este capítulo.
EL MITIN DEL PP
El senador del PP Carlos Murria introdujo en su intervención la agresión que la semana pasada sufrieron dirigentes de su partido al acudir a un mitin en Martorell, así como el anuncio de que Barcelona no será sede de una cumbre europea de ministros. El trabajo de Interior debe mejorar, dijo el senador, porque "no garantizan la seguridad de la celebración de un acto político". "Aquí empiezan a fallar las garantías democráticas", sentenció.
El secretario de Estado acusó al PP de convertir en "tesis" sobre la seguridad en Cataluña "un desgraciado acontecimiento que se produjo en un acto electoral". "No podemos elevar un hecho a tesis y llegar a la conclusión de que la seguridad se hunde", recalcó, para insistir en que las medidas de seguridad "funcionaron".
En cuanto a la cumbre europea, Camacho aseguró que la decisión de posponer el acto en Barcelona se debió a la coincidencia con las elecciones autonómicas, no a la existencia de los llamados grupos antisistema.
