Jáuregui (PSOE) cree que Zapatero no "negará el diálogo" a Ibarretxe, aunque no ve "fácil" un acuerdo

Actualizado: domingo, 6 enero 2008 11:32

Afirma que "hasta que no llegue el desistimiento en el generalato de ETA no tendremos la certeza de la paz"

BILBAO, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -

El diputado del PSOE Ramón Jáuregui consideró hoy que el presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "no va a negar el diálogo" a Juan José Ibarretxe si es reelegido en los comicios de marzo, si bien dijo "no ver fácil el acuerdo que el lehendakari pretende para ser sometido a consulta". Asimismo, indicó que tiene "demasiadas pretensiones de imponer una agenda reivindicativa", lo que puede llevar al PNV "a una posición de máximos que le convierta en un socio imposible".

En una entrevista publicada por Deia, recogida por Europa Press, el dirigente socialista señaló que el lehendakari pretende acometer "una reforma de hondo calado para incorporar a la Constitución española el derecho de autodeterminación" y aseguró que "ese diálogo se podrá mantener, pero tan legítimo es que el presidente del Gobierno español le diga que antes alcance un acuerdo político en el País Vasco que vertebre al país y le permita ir acompañado de una legitimidad social en torno a su propuesta que, sinceramente, no tiene. Porque el país está roto, dividido".

Asimismo, apuntó que "también es lógico que en ese diálogo el presidente del Gobierno le recuerde que anunció su supuesta consulta sobre la base de la ausencia de la violencia". "Ni una cosa ni otra se han cumplido", advirtió.

En esta línea, manifestó que "diálogo puede haber" porque, a su entender, si Rodríguez Zapatero es reelegido no "va a negar el diálogo" al lehendakari. No obstante, afirmó no ver "fácil" el acuerdo que "el lehendakari pretende para ser sometido a consulta el 25 de octubre".

Para Ramón Jáuregui, Juan José Ibarretxe "está recorriendo un camino muy partidista y muy equivocado". En relación a la postura del lehendakari de no dejar la iniciativa a ETA, replicó que "la pregunta es cuál". De este modo, admitió que "hay que tomar iniciativas" y que "el final del terrorismo en gran parte depende de la sociedad vasca", pero precisó que "la iniciativa no es precisamente gestionar la agenda de ETA".

"Porque, en el fondo, propone sustancialmente los dos grandes objetivos de ETA: el reconocimiento de la autodeterminación y la unidad territorial, ésta en el marco de la segunda consulta en 2010. Negociar la agenda de ETA para hacer inviable la violencia es un gravísimo error porque legitima la causa de los que matan", aseguró.

Asimismo, consideró que "el intento de deslegitimar a ETA mediante un no rotundo de la sociedad vasca paralelo a un sí a la autodeterminación" supone una simplificación de "la complejidad identitaria de este país". Del mismo modo, criticó que se "engaña" a la ciudadanía con "la promesa de la paz, buscando una definición autodeterminista o independentista de la sociedad vasca, que no tiene, a cambio de ofrecer una paz que no va a alcanzar".

El diputado vasco afirmó que Ibarretxe mantiene "demasiadas pretensiones de imponer una agenda reivindicativa después de las elecciones" con su propuesta de consulta, lo que puede llevar al PNV a "una posición de máximos que le convierta en un socio imposible" tanto para el Gobierno como para la oposición ya que PSOE y PP "jamás aceptarán" sus "pretensiones".

"VA A TARDAR"

Por otro lado, se refirió a la posibilidad de que vuelva a abrirse un nuevo proceso de paz e insistió, en este sentido, en que la forma en que se rompió el último alto el fuego por parte de ETA "ha quemado la posibilidad de que otras treguas puedan ser inicios de otros procesos".

De esta manera, señaló que sólo el abandono definitivo de la violencia "puede dar lugar a algún tipo de diálogo para cerrar esta página trágica de nuestra historia", lo que, a su juicio, "va a tardar". Opinó que nos encontramos ante "el último ciclo de ETA" pero dijo no ver "la manera en cómo se va a resolver".

"Con esto estoy queriendo atacar el núcleo del actual desencuentro de la llamada unidad democrática entre las fuerzas políticas. El corazón del debate está ahí, en la manera de la derrota de ETA -que desde el punto de vista político, judicial y sociológico está derrotada-, pero hace falta que después tengamos la certeza de su disolución por el autoconvencimiento de ese mundo de que sólo por la política pueden encontrar la defensa de su causa. Hasta que no llegue el desistimiento en el generalato de ETA no tendremos la certeza de la paz", explicó.

Jáuregui agregó que "quizás no estamos analizando suficientemente las desesperanzas que han surgido en el seno de la izquierda abertzale con esta oportunidad perdida" y destacó también "la enorme frustración que han despertado incluso en los sectores afines que fuera del País Vasco y España pudieran tener".

El político socialista indicó, aunque "el conjunto del sistema hemos mantenido la idea de que un espacio político tenía que existir en ese sector para que la violencia desaguara a la política", la experiencia demuestra que "al final siempre ha sido ETA la que ha utilizado a Batasuna" y que "la violencia ha utilizado ese entorno humano, porque hay casi 450 personas que proceden de ese mundo que han acabado en ETA, constatado por las investigaciones judiciales de estos 25 años".

Asimismo, señaló que se ha acreditado que "ha habido y sigue habiendo una dirección única de toda la agenda política de la izquierda abertzale en los que tienen las armas".

Por ello, afirmó no sorprenderse de que desde las formaciones de la izquierda abertzale "no haya habido ninguna protesta" y de que "ese mundo se ha vuelto a adaptar de nuevo a lo que ETA ha mandado". "El que parecía el Gerry Adams del país, Arnaldo Otegi, en cuanto ETA mata al teniente coronel Blanco y luego a Fernando Buesa, se convierte en el portavoz. Y él mismo ha confesado en conversaciones por ahí 'no me pidáis que condene nada porque no duro un minuto en la empresa'", agregó.

En este contexto, mostró "cierta tristeza y pesadumbre" por el hecho de que ANV "no ha jugado el papel" que se esperaba, de modo que "en abril de 2007 se especuló con que ANV prestaba sus siglas a la izquierda abertzale para apostar por la paz, pero desde que ETA rompe el alto el fuego en junio, en mi opinión, ANV se ha comportado exactamente como el recipiente de Batasuna".

"No soy quién para acreditar esa conexión -continuó-, pero me da la impresión de que se está probando y que será objeto de análisis por parte de los tribunales".