Jordi Pujol apuesta por pactos puntuales con PSOE y PP porque "no merecen confianza" para un acuerdo de legislatura

Actualizado: miércoles, 6 febrero 2008 11:40


BARCELONA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol apostó hoy por que CiU pacte de forma puntual, "día a día y en cada ocasión desde cero", con PSOE y PP tras las elecciones generales porque "no merecen confianza" para un acuerdo de legislatura.

"Sólo se puede tratar con ellos si pagan por adelantado. Hay que colgar el letrero de 'no se fía'. Llegado el caso esto limitaría mucho el alcance y el grado del compromiso de CiU. En realidad, haría imposible un compromiso duradero y que obligase de forma sistemática", afirmó Pujol en un artículo en 'La Vanguardia'.

Pujol argumentó que CiU "no debe ni puede" pactar con el PP porque durante los últimos cuatro años "ha fomentado campañas de calumnia y ha excitado los ánimos contra Catalunya". "Ha creado un ambiente de gran hostilidad y animadversión", dijo.

Respecto al PSOE, opina que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ha engañado constantemente" a Catalunya con el Estatut, "con las promesas incumplidas" de la publicación de las balanzas fiscales, con partidas presupuestarias que luego no ha aplicado, con el caos de las infraestructuras e invadiendo competencias catalanas.

Asimismo, Pujol --que durante sus 23 años en la Generalitat pactó con PSOE (Felipe González) y PP (José María Aznar)-- acusó a los dos grandes partidos españoles de utilizar Catalunya como "munición de guerra para su enfrentamiento cainita".

Pujol considera que Catalunya se juega en estas elecciones la seriedad como sociedad y la dignidad y autoestima como país porque si un país no es serio no será tomado en consideración, por lo que instó al electorado catalán a manifestar su "repulsa" por los partidos responsables del "perjuicio y menosprecio" a Catalunya.

"Mientras no restablezcamos la dignidad y el respeto no nos tomarán en serio", alertó. Según Pujol, es necesario demostrar que "maltratar a Catalunya tienen un coste importante". De cara al 9 de marzo, señaló que los electores catalanes pueden tomar dos direcciones: "La decepción, el desánimo y la renuncia", lo que conduce a la abstención, o la reacción, "la dirección que el 9-M hay que tomar".