SEVILLA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
La ex ministra de Fomento y número tres del PSOE para las próximas elecciones europeas, Magdalena Álvarez, señaló que "nunca me hubiese ido pero agradecí al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que me dijera que podía dejar mi responsabilidad y le di las gracias". "Para mi ha sido un honor haber podido trabajar para mi país y para los españoles y entiendo que cinco años es un tiempo suficiente".
Álvarez repasó brevemente su gestión señalando que "hemos invertido en estos cinco años casi 67.000 millones de euros, lo que significa un 93 por ciento más respecto a la legislatura anterior y hemos transformado todo el transporte de España, sobre todo el ferroviario". "Me siento muy satisfecha de lo que hemos hecho en estos años porque supone un salto cualitativo hacia adelante en lo que es capacidad de competir y cohesión social y territorial", afirmó.
Para la ex ministra el ferrocarril "ha sido la estrella" en estos años "con 700 nuevos kilómetros de AVE", pero también se siente orgullosa de los "2.000 nuevos kilómetros de autovía que hemos realizado" y de haber "multiplicado casi por siete la longitud de las pistas de los aeropuertos y por cinco la superficie de los edificios terminales".
Aseguró que durante estos años "siempre he tenido el apoyo del presidente porque siempre hemos estado de acuerdo. He llevado a cabo una política en la que él establecía unos objetivos que yo compartía". "Han sido cinco años muy agradables en los que siempre me he sentido y he tenido el apoyo del Presidente", recalcó.
Calificó la oposición que contra ella ha hecho el PP como "injusta, cruel y falsa". "Injusta y falsa porque todo lo que han ido diciendo no correspondía con la realidad de lo que estaba pasando y echaban por tierra todo lo que hacíamos", indicó. Y cruel, "porque han sido ataques personales, diarios y directos, en cuestiones que considero que en la política y en la vida hay que respetar".
En este sentido señaló que "he sufrido todo tipo de descalificativos hacia mi persona, hacia la forma de comportarme, hacia mi carácter y hacia todo lo que hacía, incluida mi propia familia". "El PP me ha querido presentar como una persona antipática e ignorante para desgastarme personalmente y en muchos casos han pasado la línea y estoy segura que a muchas personas no les ha parecido adecuado", indicó.
No obstante, aseguró que esas críticas "provocaban en mi justo el efecto contrario al que ellos pretendían. En lugar de minarme la moral, lo que hacían era crecerme porque yo tengo ese carácter".
Álvarez no cree que sea una persona problemática para quienes trabajan con ella "y a los hechos me remito, porque soy la dirigente que ha cambiado a menos gente que nadie nunca". "Ahora bien, sí soy problemática para el PP y para quienes defienden cuestiones que yo considero que no son adecuadas para mi país", afirmó.
MUY DIRECTA Y MUY SINCERA
"Yo soy muy directa y muy sincera y eso en política no siempre cae bien, aunque es curioso que los mismos que piden sinceridad y transparencia critiquen luego a quienes la ejercemos", indicó.
La ex ministra consideró que su "gran fallo" y su principal defecto ha sido la comunicación porque "creo que no he sido capaz de transmitir adecuadamente a la opinión pública la gestión que hemos desarrollado".
A su sucesor, José Blanco, no le da ninguna recomendación ya que "cada uno tiene su propia forma de hacer, de trabajar y de gestionar y lo mejor es que sea él mismo".
"Mi parecer sobre qué política se debe seguir no ha cambiado", así, sobre el traspaso de algunas competencias reclamadas por Comunidades en materia de transporte, consideró "lógico" que se transfieran las cercanías ferroviarias, "siempre bajo unas determinadas condiciones".
Recordó, en este sentido, que cuando ella era responsable del Ministerio "habíamos llegado a un acuerdo previo con los sindicatos que se lo ofrecimos a la Generalitat de Cataluña y que creo que es el mismo que ahora están barajando".
Con respecto a los aeropuertos "yo sigo manteniendo el modelo que presenté". "Considero que la participación de las Comunidades Autónomas es posible pero con las garantías necesarias para que sigan funcionando en red y no se pierda la economía de escala que representa esa dimensión ya que las segregaciones no son buenas porque se pierde mucho valor añadido", finalizó.
