PAMPLONA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, afirmó hoy en Pamplona que su compromiso con Navarra y con UPN "es lisa y llanamente para siempre" y aseguró que espera de UPN "que siga haciendo las cosas igual de bien que lo lleva haciendo en los últimos años". Si es así, añadió, "yo le ofreceré lo que le he dado siempre, reparando los errores que sin duda alguna he podido cometer como cualquier ser humano".
Rajoy realizó estas declaraciones durante una conferencia titulada 'España y el valor de la responsabilidad', impartida en el hotel Iruña Park de Pamplona en el marco de los cursos de verano 'José Javier Múgica', que en esta edición llevan como título 'Constitución y retos de futuro'. Alrededor de mil personas, entre ellas numerosos representantes del Gobierno y de UPN, asistieron a la conferencia.
En su intervención, Rajoy hizo especial hincapié en la situación de crisis económica y aseguró que España se encuentra "mal preparada para encarar la crisis", que puede llegar a ser "semejante o peor a la de 1993", ya que somos "más vulnerables que los demás países de nuestro alrededor y en la legislatura anterior no se han hecho reformas de calado en la estructura económica".
Sobre la labor de Zapatero, Rajoy criticó su "irresponsabilidad por no hacer nada, por escurrir el bulto, por no dejarse aconsejar, por no escuchar, en definitiva por no hacer lo que se espera que debe hacer alguien que quiere enfrentarse con valentía a los problemas".
Sobre la comparecencia de mañana de Zapatero en el Congreso, Rajoy afirmó que no sabe qué dirá "ni si de nuevo seguirá en sus trece y eludirá hablar directamente de crisis", pero en todo caso, añadió, "que nadie tenga la tentación de pensar que echando balones fuera o creando cortinas de humo va a paliar la gravedad de la crisis, porque ni un solo esfuerzo del Gobierno debe ser desaprovechado abriendo debates artificiales".
En este sentido, el presidente del PP destacó que "como no sabe qué hacer con lo importante, Zapatero ya vuelve a dejar salir viejos conejos de la chistera, aunque nadie le ha pedido que abra debates sobre asuntos sobre los que no hay demanda social, porque ahora el reto más importante que tiene España, además de la derrota de ETA, es atender los problemas de las economías de los españoles y esto es lo que se espera de un Gobierno responsable".
Eso significa, subrayó, "seguir ofreciendo al Gobierno nuestro apoyo para salir de la crisis y esto significa también criticarlos cuando no quieren escuchar, ofreciendo entonces propuestas y alternativas".
Para ello, recordó que el PP ha presentado un paquete de medidas "para recuperar la confianza en la economía española, promoviendo la austeridad y la transparencia de las Administraciones Públicas, como me consta que hace meses ya hizo el Gobierno de Navarra, con un plan bien diseñado y transparente".
Rajoy también afirmó que si su partido quiere ser mayoritario de nuevo tiene que "poner en valor y potenciar el hecho de ser un partido con las ideas claras, un partido que sigue defendiendo el espíritu que hizo posible el consenso que ha dado 30 años de vida a nuestra Constitución".
A su juicio, es "una irresponsabilidad, con una crisis como la que estamos viviendo, volver otra vez a hablar de lo que ocurrió hace 70 años y sacar temas que sabemos que dividen a los españoles".
Además de su discurso, Mariano Rajoy también respondió a preguntas del público sobre cuestiones diversas como el aborto, al que se refirió como "un drama humano". A su juicio, "es terrible que para distraer la atención se ponga encima de la mesa este tema cuando además no iba en el programa electoral del PSOE" y recalcó que la postura del PP "es la de siempre, respetar las opiniones de todos, y no tocar este asunto porque ya tiene un consenso".
En el turno de preguntas, Rajoy habló de las lenguas cooficiales y criticó que la Administración le diga "cómo tengo que educar a mis hijos". También afirmó que seguirá "trabajando mucho y siendo muy persuasivo" en Andalucía y Cataluña para ganar las próximas elecciones.
En cuanto a la situación de Navarra, evitó hablar de la posibilidad de un Gobierno entre PSN y los nacionalistas y afirmó que actualmente "se están haciendo las cosas muy bien y lo mejor para Navarra es el Gobierno que hay ahora".
Por su parte, Miguel Sanz también hizo de nuevo alusión al pacto UPN-PP para subrayar que "sigue teniendo el compromiso firme y leal de nuestro partido, ya que ha sido un instrumento de libertad y una garantía de éxito electoral". "No estamos al final de nada sino al inicio de muchas cosas que nos corresponde hacer desde el ejercicio de una oposición responsable", concluyó.
