Una de las heridas explicó a un familiar que el conductor iba a "demasiada velocidad"
LLEIDA, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
El equipo de médicos del Hospital Arnau de Vilanova que esta noche atendieron a las víctimas del accidente de autocar en La Sentiu de Sió (Lleida) teme por la vida de los dos heridos más graves, que siguen ingresados a la UCI con pronóstico muy grave.
El accidente provocó la muerte de tres personas: el conductor del autobús, José P.B. de 62 años, que murió en el hospital, y Rosa F.S.G. de 55 años, y Adelino S.R., de 54, que fallecieron en el mismo lugar del siniestro.
El médico adjunto de urgencias y jefe de guardia del hospital durante la noche, Pedro Valdrés, confirmó que, de los 13 heridos, seis siguen ingresados en estado grave, mientras que a seis de los siete heridos leves les dieron el alta esta madrugada --la otra sigue ingresada--.
Valdrés explicó que el centro hospitalario ya ha contactado con el cónsul portugués en Barcelona para repatriar "lo antes posible" los cuerpos de los tres fallecidos.
"DEMASIADA VELOCIDAD".
Bruno, primo de la pasajera del autobús herida leve que sigue ingresada, aseguró a Europa Press que su familiar le contó que el "conductor iba a demasiada velocidad" cuando el vehículo "empezó a irse y cayó" por un barranco de unos cuatro metros situado justo en una curva al kilómetro 33 de la C-13.
De hecho, los Mossos d'Esquadra ya apuntaron como muy probable que el accidente fuera provocado por una velocidad "inadecuada", cosa que debería confirmar el análisis del tacógrafo del vehículo. De todas formas, la investigación no descarta otras causas, como una distracción.
Los mayoría de los ocupantes del autocar trabajan en la Seu d'Urgell (Lleida), y alguno residía en Andorra. Muchos de ellos iban de vacaciones a su país, Portugal. Las edades de las víctimas van de los 12 a los 62 años.
