Montilla arremete contra "algunos" miembros de CiU por "llamar usurpador" al Govern d'Entesa

Actualizado: miércoles, 18 julio 2007 18:10

BARCELONA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, José Montilla, arremetió hoy, durante la sesión de control al presidente en el pleno del Parlament, contra "algunos" diputados y representantes de CiU por "pensar y decir" que los miembros del Govern d'Entesa "son unos usurpadores". "Ustedes piensan que el país es suyo y que los que estamos aquí somos unos usurpadores; eso es lo que piensan ustedes", aseveró Montilla en un tono de intensa irritación.

El detonante de este arranque del presidente Montilla lo dio el diputado y ex alcalde de Ripoll Eudald Casadesús, quien desde su escaño respondió burlonamente y en voz alta a la afirmación de Montilla de que "la Generalitat tiene muchos años por delante". "¡Lo dudo!", replicó Casadesús, motivando de forma evidente el enfado de Montilla, que inmediatamente le respondió: "Seguro, muchos años por delante, señor diputado".

"Ustedes piensan que si no gobiernan se acaba el país, pero esa no es la percepción de la mayoría de ciudadanos", prosiguió Montilla, y fue elevando el tono por encima de las voces y aplausos de los diputados de uno y otro lado del hemiciclo, que se convirtieron en abucheos mutuos cuando Montilla denunció que las palabras de Casadesús habían "delatado lo que piensan algunos" de los miembros de la federación.

"No todos, porque también sé que hay personas que no piensan eso", añadió enseguida, rebajando la intensidad. Después puntualizó incluso que el presidente de CiU, Artur Mas, "nunca ha dicho que este gobierno es un gobierno de usurpadores", pero aseguró que "podría citar personas que sí lo han dicho" e incluso se ofreció a Mas a decirle "después públicamente" quiénes son esas personas.

En su réplica, Mas lamentó "el tono" de Montilla y le reclamó que le digiera sus respuestas personalmente, en lugar de responder a otros diputados de la federación nacionalista. "Yo desde este mismo escaño oigo muchos comentarios y no me dedico a replicarlos. La pregunta se la hago yo y me gustaría que la respuesta me la diera a mí y no se encarase contra otros diputados de nuestro grupo", afirmó.

Mas consideró que el mismo Montilla había desmentido sus propias acusaciones al reconocer, poco después del alboroto parlamentario, que el Gobierno y CiU habían sido capaces de llegar a acuerdos importantes para la ley de la Agencia Tributaria y otros asuntos en esta legislatura. "Nosotros no consideramos a nadie un usurpador, porque si lo considerásemos así, ¿para qué hemos de hacer el esfuerzo de llegar a acuerdos con ustedes?", respondió.

La pregunta de Mas en la sesión de control al presidente se refería, no obstante, a una cuestión absolutamente diferente, en tanto que pedía la valoración del Govern de las ayudas de 2.500 euros por nacimiento anunciadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Debate del Estado de la Nación.

Mas denunció las "fuertes críticas" que desde los partidos del Gobierno catalán se hizo a la propuesta similar que él mismo planteó durante la campaña a las elecciones autonómicas, y celebró que "hayan cambiado de opinión" al valorar positivamente la medida adoptada por Zapatero.

Montilla, que reconoció como "positiva" la medida anunciada por Zapatero "porque las políticas para la familia han de ser valoradas positivamente siempre por los gobiernos progresistas", admitió también que "lo importante es poner en valor las cosas que nos unen y no las que nos separan". Por ello, reconoció a CiU su predisposición a alcanzar acuerdos en los temas de país, remarcando también que en esos acuerdos "el Govern también ha demostrado que su oferta de mano tendida era una realidad".

Fuentes de la Presidencia confirmaron después que, en su última sesión de control en el Parlament antes del verano, el presidente Montilla tenía previsto poner en valor la capacidad de consenso con CiU, en un tono más conciliador, pero que éste se vio truncado cuando el comentario de Casadesús le recordó el comentario recurrente --según las mismas fuentes-- de algunos de los miembros de la federación.