El Morabit condena los atentados del 11-M y asegura que no tuvo "la más mínima participación"

Actualizado: lunes, 2 julio 2007 22:33


MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

Fouat El Morabit, acusado de pertenencia a organización terrorista para el que la Fiscalía pide 12 años de prisión, condenó hoy ante el tribunal los atentados del 11 de marzo en Madrid y señaló que tuvo "la más mínima participación, ni la más pasiva actuación que se pueda imaginar".

"Mi cultura, mis frenos morales, funcionan muy bien sobre todo cuando se trata del prójimo; me siento profundamente indignado de ser acusado de ser un terrorista, sin la mínima justificación razonable", indicó.

Explicó que se siente "indignado" y no tiene "más remedio que expresarlo y mi profunda impotencia y rabia a la vez". Tras el 11-M y las detenciones, explicó El Morabit, tuvo una actuación que "representa el patrón de comportamiento de una persona totalmente inocente ajena a cualquier acto terrorista". "Es más que suficiente soportar tres años y medio de cárcel sin tener nada que ver", añadió

El Morabit destacó, además, que no ha quedado demostrado que en la casa de la calle Virgen del Coro de Madrid se celebraran reuniones de tipo islamista y destacó que la visita del suicida Rifaat Anouar a la vivienda el día 11 de marzo por la noche no estaba dirigida a buscar refugio, ya que en aquel momento todo el mundo pensaba que el responsable de la masacre era la banda terrorista ETA.

El Morabit denunció la actitud de algunas acusaciones y les echó en cara sufrir lo que denominó "el síndrome de Diógenes". "Sus tesoros incriminatorias resultan ser nada", dijo y añadió que "no hay nada en concreto contra él porque "sencillamente no tengo nada que ver". "Apelo a la lógica y la justicia", agregó

EL FADUAL EL AKIL

Por su parte, Abdelilah El Fadual El Akil, acusado también de pertenencia a organización terrorista, se dirigió también a las víctimas y dijo que "cada día" llora por sus familiares. "Cuando me levanto por la mañana siempre hablo con el espejo, ya que no tengo visita de mi familia, porque vive en Marruecos; me digo ¿por qué estoy aquí? y no hay nadie que me conteste", agregó.

El acusado resaltó que vino a España "debajo de un camión" y que con ese esfuerzo quiere demostrar que quiere a este país. "Yo también me siento una víctima, no he visto crecer a mi hijo, no le he visto empezar a andar", destacó.

El Fadual El Akil reconoció que era amigo de Jamal Ahmidan, alias "El Chino", pero concretó que una vez que regresó a España después de permanecer encarcelado en Marruecos, en 2003, perdieron el contacto. "Aquí se mete a todos en el mismo saco porque somos musulmanes y no todos somos iguales", indicó.

Los considerados autores intelectuales de los atentados Rabei Osman El Sayed, alias "Mohamed El Egipcio", y Youssef Belhadj indicaron que se acogían a todo lo dicho por sus abogados. "El Egipcio" únicamente añadió que pide "justicia a la Sala".

TORO NO CONDENA LOS ATENTADOS

Por su parte, el asturiano Antonio Toro, ex cuñado de José Emilio Suárez Trashorras, dijo que únicamente quería concretar dos datos que considera no han quedado suficientemente claros. Así indicó que nunca entregó al acusado Rafa Zouhier una muestra de explosivo y dijo que tampoco le dio detonadores.

En este sentido, agregó que la prueba esgrimida por las acusaciones para demostrar su viaje a Madrid para realizar la entrega de estos dispositivos es que utilizó para el desplazamiento un Renault Megane. Resaltó que, según se ha podido comprobar a través de la sentencia de la Operación Pipol, en la que fue juzgado por tráfico de drogas, en aquel momento, verano de 2003, el coche se encontraba en un desguace.

Antonio Toro está acusado de los delitos de colaboración con organización terrorista, suministro de sustancias explosivas y asociación ilícita, delitos por los que el Ministerio Público solicita 23 años de cárcel.

Por parte José Emilio Suárez Trashorras, para el que la Fiscalía pide 38.962 años de prisión, declinó dirigirse al tribunal.

EL HASKI NO ENTIENDE LOS CARGOS EN SU CONTRA

Mientras, Hassan El Haski, dijo no entender, dos años después de su detención, los cargos que existen contra él. destacó que ninguno de los 116 detenidos en relación con la masacre le conoce

Dijo también que no pertenece a ningún grupo terrorista y es "completamente inocente" de cualquier acto de este tipo. "Al que tenga alguna prueba yo le desafío", dijo y señaló que su inocencia es "evidente".

"No consigo entender como es posible que la respetable fiscal se siga aferrando a acusarme", añadió. El Haski, primero de los presuntos ideólogos en hacer uso de su última palabra, se dirigió a la sala en árabe con evidente nerviosismo y se defendió con ayuda de un papel con anotaciones.

Por su parte el acusado Mahmoud Slimane Aoun, acusado de colaboración con banda armada y falsedad en documento oficial, indicó hoy que es "inocente" y recalcó que huyó de su país para evitar la violencia ya que allí mataron a su hermano, su padre ciego, sus tíos y siete de sus hijos.

"Vine aquí para vivir en paz", resaltó. "Me acusan de terrorismo y estoy muy lejos de esas cosas", destacó.

El Haski reconoció que conocía conocía a varios de los implicados en los atentados pero dijo que "no sabía nada de lo que querían hacer". Destacó, además, que entre Jamal Ahmidan alias "El Chino" y él existía odio a causa de su religión, ya que Slimane Aoun es de procedencia chiita.

Justificó las llamadas efectuadas a "El Chino" por la necesidad de que le devolviera una lámpara de un vehículo que él se encargaba de reparar. Además el joven asturiano Antonio Iván Reis Palicio se limitó en su turno a agradecer su labor a su abogado y a decir que es "inocente".