Los Mossos someterán al taxista de Barcelona que simuló su secuestro a un análisis psicológico

Actualizado: miércoles, 14 noviembre 2007 19:46


BARCELONA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Federación Catalana del Taxi (FCT) reclamó hoy que los taxistas noveles tengan que superar un periodo de prácticas para obtener la licencia definitiva y así poder detectar antes situaciones como la del joven taxista de Barcelona que el pasado lunes simuló su propio secuestro.

En declaraciones a Europa Press, el coordinador general de la FCT, Josep Maria Goñi, dijo que los máximos representantes del sector ya consideraron el miércoles de la semana pasada que los actuales exámenes teóricos "no son suficientes" para garantizar que los nuevos taxistas estén bien preparados.

Por ello, y para detectar posibles casos como el de Alberto B.R. u otros, pidieron que, tras aprobar el examen teórico, los aspirantes pasen un periodo de pruebas de algunos meses, todavía indeterminado, vinculados a una radio emisora y tutelado por uno de los profesores donde han aprobado el examen. Igualmente, el coche tendría que llevar un aparato GPS para ser localizado en todo momento.

Goñi también lamentó que con el actual reglamento del taxi Alberto B.R. podría volver a conducir su taxi mañana mismo. El dirigente de la federación lamentó como ha terminado la historia de este taxista y, aunque dijo no conocerle personalmente, le calificó de "excelente persona", aunque admitió que, probablemente, no está en las mejores "condiciones" para ser taxista.

DE MOMENTO, EN LIBERTAD

Precisamente, los Mossos d'Esquadra explicaron hoy a Europa Press que, por el momento, el joven no está detenido y no se plantean acusarle de simulación de delito hasta que no sea sometido a un análisis psicológico.

Albert B.R., de la Asociación Teletaxi Barcelona, dio, sobre las 11 horas del lunes, un aviso de alarma a su emisora a través del código secreto preestablecido para estos casos. Según su versión, había recogido a varios pasajeros en el distrito de Sant Andreu de Barcelona.

A partir de este momento, la radio de su vehículo y su teléfono móvil estuvieron desconectados. Centenares de taxistas, los Mossos d'Esquadra y varias policías locales se movilizaron para buscar a la víctima del posible secuestro, entre rumores y testimonios contradictorios que le situaban en la parte norte de Barcelona, acompañado de dos, tres o cuatro individuos e incluso encañonado por una pistola.

Poco antes de las 20 horas, llamó desde una cabina telefónica a su familia y explicó que estaba en Vic bien de salud, aunque acababa de "despertar" tras recibir un golpe en la cabeza, por lo que no recordaba nada.

A unos 400 metros de donde dijo haberse "despertado", se halló su taxi, un Opel Vectra, que ahora está siendo analizado por la Policía científica para encontrar rastros de los supuestos raptores, que no han sido localizados.

Tras declarar en la comisaría de los Mossos en Vic, el joven fue trasladado al Hospital General de la localidad para que le sometieran a una revisión, que evidenció que no tenía ninguna herida.

Ayer, después de los primeros interrogatorios de los Mossos, el joven seguía manteniendo su primera versión --que había sido secuestrado--, y al reconstruir los hechos en Vic (Barcelona) dijo no "recordar nada" ya que aseguraba haber quedado inconsciente tras un golpe en la cabeza.

Finalmente, ante las contradicciones y la falta de evidencias, Alberto B.R. admitió que se lo había inventado "todo" y que nadie le secuestró.

El joven explicó que activó el protocolo de alerta, mediante un código secreto preestablecido, en "un arrebato". Al comprobar todo el revuelo que se había organizado --incluyendo la movilización de sus compañeros taxistas y numerosos efectivos policiales--, simuló el secuestro. Por el momento se desconocen los motivos exactos de su huida y engaño.

Ni la familia del taxista ni la Asociación Teletaxi Barcelona quisieron hacer declaraciones a Europa Press sobre lo sucedido.