PAMPLONA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El año pasado se registraron en Navarra 25 casos de meningitis tipo B, uno de ellos con resultado de muerte. Estas cifras son ligeramente superiores a las de 2006, año en el que se contabilizaron 19 casos de este enfermedad, según datos facilitados hoy a Europa Press por el jefe de servicio de Epidemiología, Prevención y Promoción de la Salud del Gobierno de Navarra, Aurelio Barricarte.
La única muerte que se produjo el año pasado por esta enfermedad en la Comunidad foral fue la de una joven de 17 años, casualmente de la misma edad que la vecina de Sangüesa que falleció ayer en el Hospital de Navarra por un caso que, según ha quedado confirmado hoy, era sepsis meningocócica.
De los 25 casos de 2007, tres se registraron en menores de un año; ninguno en el tramo de uno a dos años y cuatro en niños con edades comprendidas entre los dos y los cuatro años. En el tramo de cinco a nueve años hubo un solo caso; y dos, en el de 10 a 14. Los casos más números, 11, se confirmaron en adolescentes de entre 15 y 19 años y, por último, cuatro en personas mayores de 20 años.
Los dos casos con resultado de muerte de los últimos años fueron por meningitis tipo B ya que, como explicó Aurelio Barricarte, de tipo C "no se han confirmado en los dos últimos años, desde que comenzamos con las vacunas a todos los menores de 22 años". Para la tipo B no existe vacuna.
Por eso, y desde que se conociera que la joven, que finalmente falleció ayer, podía tener sepsis meningocócica, se activó el protocolo correspondiente, que según apuntó Barricarte, consiste en identificar lo que se denomina "contactos íntimos". Éstos corresponderían, en primer lugar, a las personas que viven en el mismo domicilio, y en segundo lugar, a los 'contactos' escolares o laborales del sujeto.
En este punto, por ejemplo en guarderías, "se considera 'contactos' a todos los niños de ese centro, pero en Bachiller, sólo consideramos contactos a los que comparten el aula, a no ser que los alumnos tengan actividades conjuntas y entonces pasan a ser 'contactos' todos los del mismo curso", explicó Barricarte.
Una vez identificados, se administra "solamente a los 'contactos íntimos' un antibiótico para erradicar el meningococo de la garganta, y así el sujeto ya no puede sufrir la enfermedad ni trasmitirla a otro". Dicho protocolo, subrayó Barricarte, "se sigue de igual forma evolucione como evolucione el enfermo".
SÍNTOMAS
La enfermedad que origina el meningococo tipo B tiene dos formas clínicas principales, según Barricarte. La primera es la meningitis, un cuadro clínico que consiste en la inflamación de las meninges, que son unas envolturas del cerebro.
Este cuadro clínico, que se instaura progresivamente, tiene como síntomas fiebre alta, malestar general, dolor de cabeza intenso y dificultad de mover el cuello. Posteriormente se entra en cuadro de somnolencia, estupor y coma.
La segunda forma clínica, que es la que sufrió la joven fallecida ayer, es un cuadro de sepsis meningocócica, que se inicia con fiebre alta, malestar general y la aparición de manchas en la piel de color rosáceo. Posteriormente, se establece el shock séptico, con fracaso de las constantes vitales, que pueden llevar a la muerte.
La causa de la meningitis es una infección, provocada por un germen, que no en todos los casos de los sujetos infectados desarrolla la enfermedad. Lo normal, concluyó Barricarte, "es que las defensas del sujeto venzan al germen y se curen sin sufrir la enfermedad ni ningún síntoma".
