Los nuevos propietarios de Alcalá 20 aseguran que sólo falta la autorización de Gallardón para abrir la discoteca

Actualizado: miércoles, 17 diciembre 2008 20:06

Hoy se cumplen 25 años del trágico incendio en la emblemática sala, en el que murieron 82 jóvenes

MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los nuevos propietarios de la discoteca Alcalá 20, renombrada como Adraba, aseguran que la sala está totalmente acondicionada para su reapertura y dispone de todas las licencias preceptivas, pero no pueden abrir sus puertas debido a que el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, se niega a reunirse con ellos para darles el visto bueno definitivo.

Esta situación coincide con el 25 aniversario del fatídico incendio de Alcalá 20 de Madrid, en la que en la madrugada del 17 de diciembre de 1983 perdieron la vida 82 personas debido al fuego y al humo.

Desde entonces, la emblemática sala ha permanecido cerrada al público, pese a los intentos fasillos de sus actuales dueños, el grupo FSM, de abrirla desde 2005 sin contar con licencia. Adraba cuenta ya con los papeles en regla, pero el Ayuntamiento de Madrid no autoriza su apertura, según denunció a Europa Press el grupo FSM. "Con Gallardón nos hemos topado", exclamó uno de los empleados de la compañía.

Adraba ha intentado desde 2005 abrir sus puertas en diferentes ocasiones, pero el Consistorio madrileño ordenó, en todos los casos, el cese inmediato de actividad y el precinto del recinto al no tener licencia. La sala abría justificándolo en el 'silencio administrativo positivo' ya que, según decían, habían solicitado la licencia meses antes y ningún técnico municipal había visitado el lugar.

El 17 de diciembre de 1983, hacia las 5.00 horas, se declaró un incendio en el interior del local, cuyas puertas de emergencia en la calle Arbalán estaban cerradas con candados y bloqueadas por cajas, impidiendo la salida de las personas que en ese momento se encontraban en su interior. La escalera principal se convirtió en una chimenea enorme de humo, y los 50 bomberos que atendieron el incendio sólo pudieron sacar a los supervivientes por la puerta de la calle Alcalá.

El resto, 82 personas, murieron la mayoría asfixiadas en el interior, a pesar de que se consiguió controlar el fuego fácilmente en apenas una hora. El cortocircuito que causó el fuego y la carencia de las mínimas medidas de seguridad fueron las principales causas del terrible suceso.

Este suceso se produjo en un mes trágico para Madrid, ya que el 27 de noviembre del mismo año un accidente de avión de la compañía Avianca en Barajas había causado 181 muertos, y diez días antes, un choque entre dos aeronaves, de Iberia y Aviaco respectivamente, también en el aeropuerto madrileño, se saldó con 93 fallecidos.

Diez años más tarde, un juez decretó penas de cárcel para los cuatro copropietarios del local, para el autor de la instalación eléctrica y para el inspector del Ministerio del Interior por delitos de imprudencia temeraria. Además, el Estado tuvo que indemnizar a las familias de las víctimas, cosa que se produjo cuatro años más tarde. Al Ayuntamiento se le exoneró de la responsabilidad civil que reclamaban las víctimas.

EL FUTURO DE LA SALA

La sala Adraba reabrió sus puertas el 29 de noviembre de 2005 con una fiesta privada para gente del mundo del entretenimiento nocturno. La apertura se produjo después de que dos días antes el Ayuntamiento hubiera notificado el cierre inmediato y precinto de la sala por carecer de licencia de funcionamiento, hecho que la compañía negaba alegando 'silencio administrativo positivo' ya que, según decían, habían solicitado la licencia meses antes y ningún técnico municipal había visitado el lugar.

Sin embargo, el 30 de noviembre de hace tres años Alcalá 20 abrió de nuevo sus puertas gracias a una resolución judicial que suspendió provisionalmente el apercibimiento de cierre emitido por el Ayuntamiento, que al día siguiente compareció junto con los dueños del local en una audiencia sobre el precinto.

En dicha audiencia, celebrada el 1 de diciembre, el juez de la sala de lo contencioso administrativo número 12 decidió mantener el cierre cautelar indicando que no se puede iniciar una actividad sin tener la licencia de funcionamiento. El Consistorio había denegado dicho permiso alegando que la sala no cumplía con los requisitos de seguridad necesarios para ello.

El 14 de noviembre de 2007, la discoteca volvió a intentar abrir sin permiso, y el Ayuntamiento re-precintó las instalaciones al seguir careciendo de permiso. Según confirmaron fuentes municipales a Europa Press, desde entonces no ha habido ningún otro movimiento en este sentido, y la discoteca sigue cerrada.

CERRADA 25 AÑOS DESPUÉS

Hoy en día, aunque la sala sigue cerrada, la página web del grupo FSM informa de que Adraba es "un espacio espectacular y vanguardista" con "un toque de elegancia cosmopolita y un aire de sobrio glamour" que "se dan la mano en un ambiente donde el refinamiento y la sofisticación están a disposición de todas aquellas personas que buscan algo más en el epicentro de la capital".

Según la empresa, el local ha sido "totalmente reformado" y cuenta "con las medidas de seguridad más avanzadas de Europa y una espectacular decoración firmada por Miguel Domingo". En ella el visitante puede acceder "a una gratificante experiencia de ocio que colmará las expectativas de los más exigentes y sibaritas jueces del buen gusto y la modernidad".

"En sus distintos espacios, Adraba no sólo acogerá las veladas más exclusivas de la ciudad, sino también, y sobre todo, servirá de plataforma para todo tipo de eventos de empresa, desde presentaciones de productos a ruedas de prensa, pasando por cenas, desfiles, exposiciones y un largo etcétera de variados acontecimientos", informa la web.

Así, "teniendo como base un equipo humano altamente especializado, una infraestructura tecnológica insuperable y unas condiciones estratégicas muy competitiva, Adraba despunta como nuevo punto de encuentro para la élite social de la capital de España".