MÁLAGA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Obispo de Málaga, Antonio Dorado, denunciará el próximo domingo día 30 de diciembre en la fiesta católica de la Sagrada Familia en su carta pastoral 'La situación de la familia, un gran desafío' el divorcio express, el aborto y la violencia infantil. Según indicó Dorado, este tipo de divorcios provoca "una autodestrucción lenta del tejido social y de las relaciones primarias que lo sustentan, básicas para la educación, la madurez y el desarrollo psicológico de la persona".
Según precisó Dorado a través de un comunicado, basta con mirar las estadísticas del último año para comprobar los datos del divorcio. Para él, "se ha convertido prácticamente en un sistema de repudio, donde no siempre es el inocente el que sale mejor parado".
"Esta posibilidad legal de romper el matrimonio lleva a muchas parejas a que, en lugar de tomarse un tiempo para la reflexión, para buscar ayuda y para dialogar, tomen decisiones precipitadas. Además, se constata que aquellas personas que se han divorciado ya una vez vuelven a divorciarse en un porcentaje alto", concretó.
Asimismo, hizo hincapié en que "las principales víctimas de estas rupturas son los niños, pero se ha corrido un tupido silencio sobre esta cuestión".
ABORTO.
El Obispo también criticó la cuestión del aborto e informó de que los recientes casos de clínicas abortistas cerradas en Barcelona y Madrid "han provocado reacciones comprensibles entre los ciudadanos normales, que somos la mayoría".
"Estos auténticos infanticidios corren el riesgo de paliar el impacto grave de todo aborto, también de los que se practican en los primeros días de gestación y que se presentan asépticamente como interrupción voluntaria del embarazo, para ocultar su triste realidad", agregó.
Dorado hizo un llamamiento a todos los católicos y a las personas contrarias a esta práctica para "alentar a la sociedad a que se rebele".
Finalmente, se refirió a la violencia infantil en los hogares y en la escuela e indicó que "tiene su origen en la falta de un hogar cálido y acogedor".
"Cuando el niño no se siente querido ni escuchado, cuando no percibe en las personas queridas un testimonio claro de amor y paciencia, cuando se ve habitualmente privado de uno de sus progenitores, cuando es utilizado como moneda de cambio y cuando tiene que permanecer en el colegio más de 10 horas diarias, es comprensible que reaccione con violencia, sin ser culpable", precisó.
Para el Obispo esta fiesta tratará este año sobre "un fondo social oscuro y doloroso, que ha cobrado una dramática actualidad entre nosotros. Estos tres hechos particularmente graves deben ser denunciados con dureza y debemos exigir las medidas posibles dentro de la legalidad vigente y alentar un cambio de leyes".
Dorado concluyó diciendo que el domingo es "una jornada muy propicia para que los matrimonios celebren sus bodas de plata y de oro; y para que todos revisemos en profundidad nuestra convivencia y demos gracias a Dios por la familia en general y por la nuestra, de modo particular".
