OTAN.- Rusia responderá este sábado a la oferta de la Alianza de participar en el escudo antimisiles

Actualizado: sábado, 20 noviembre 2010 9:49

Los aliados se fijarán la meta de finales de 2014 para traspasar el control de la seguridad de Afganistán a las autoridades locales

LISBOA, (de las enviadas especiales de EUROPA PRESS, Laura Caldito y Beatriz Fernández)

El presidente ruso, Dimitri Medvedev, responderá este sábado a la oferta que le ha hecho la OTAN de que participe en el futuro sistema de mando y control de su escudo contra misiles balísticos, durante la reunión del Consejo OTAN-Rusia con la que concluirá la 61 cumbre de jefes de Estado y de Gobierno aliados que arrancó este viernes en Lisboa.

En el nuevo concepto estratégico que guiará la acción de la Alianza en la próxima década, y que los líderes aprobaron ayer viernes, la OTAN ya avanza que buscará "activamente" la cooperación con Rusia y con otros socios euroatlánticos en el sistema de defensa antimisiles.

El presidente de EEUU, Barack Obama, confió ayer en poder incrementar la "cooperación" con Moscú en esta materia y recordó que todos los países implicados, incluida Rusia, "comparten muchas de las amenazas" aludidas.

El sistema planteado contempla la colocación de interceptadores en barcos en el Mediterráneo a partir de 2011, para proseguir con interceptadores terrestres en Rumanía, en 2015, y en Polonia, a partir del año 2018. Estados Unidos discute también la colocación de un radar en Turquía, pero Ankara aún no ha dado una respuesta definitiva.

Una de las principales reticencias turcas para sumarse al acuerdo es la continua referencia de las potencias a Teherán como enemigo a combatir. Por este motivo, los líderes de la OTAN han dejado de referirse a Irán específicamente para advertir de los riesgos de un hipotético ataque con misiles.

De hecho, el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen, señaló que son más de 30 países los que tienen o se están dotando de misiles balísticos, y que algunas de estas naciones podrían alcanzar objetivos en el espacio euroatlántico, sin citar a ningún país en concreto.

Al margen de las discusiones sobre el escudo antimisiles, los líderes aliados anunciarán que el proceso de transición para transferir el control de la seguridad de Afganistán a las autoridades locales arrancará a principios de 2011, con el objetivo de que concluya a finales de 2014, tal y como ha solicitado el presidente afgano, Hamid Karzai, que participará en la cumbre.

OBJETIVO REALISTA, PERO NO GARANTIZADO

Rasmussen ha indicado que considera "realista" cumplir este plazo, si bien ha aclarado que prevé que las tropas internacionales permanezcan presentes en el país más allá de 2014. Ahora bien, no desempeñarán entonces un papel de combate, sino que se quedarán en esa nación en apoyo a las fuerzas locales, a las que podrán entrenar y formar.

Fuera de los micrófonos, un alto responsable de la Alianza ha reconocido que si bien el objetivo de completar el traspaso de la seguridad a los afganos en 2014 es "realista", "no está garantizado" y dependerá de la situación de la seguridad sobre el terreno y también de las acciones de los talibanes.

La Alianza Atlántica también es consciente de que está "luchando contrarreloj" ya que la opinión pública afgana es menos tolerante a la presencia internacional que en 2002 y eso en parte porque los países presentes en Afganistán durante años no han invertido los recursos necesarios en el país para avanzar, según la misma fuente.