MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un reducido grupo de padres acudieron esta mañana a dejar a sus hijos, estudiantes de Secundaria y Bachillerato, en el colegio Miguel Hernández de Aluche tras la imposibilidad de retomar las clases en el Sagrado Corazón. Destacaron la "organización" por parte del equipo docente y las "buenas condiciones" de las instalaciones educativas.
"Hemos podido entrar y comprobar que tiene calefacción y todo lo necesario, que cuenta con bastante luz y tiene un buen patio, está en buenas condiciones", explicó uno de los padres, Javier Herreno, en declaraciones a Europa Press.
Una de las madres, Teresa Díez, destacó que al centro de Aluche "le falta vida" pero que serán los niños y los profesores "los que se ocuparán de traerla desde hoy". El Miguel Hernández, en la calle General Romero Bassart, 88, es un colegio que oferta la Consejería de Educación para acoger alumnos de otros centros cuando en ellos se acometen obras de envergadura.
"TRASTORNOS" POR EL TRASLADO
Otra de las madres, Laura Galán, señaló que sus dos hijos acuden "afortunadamente" al mismo colegio, el Miguel Hernández, y que el único "trastorno" está en el momento de levantarse, a las 6.00 horas, una hora antes de lo que hasta el momento era habitual. "Me imagino que se irán haciendo poco a poco", señaló. También destacó la eliminación del servicio de comercio.
Sobre si piensa matricular a sus hijos en los Sagrados Corazones el próximo año, Galán comentó en declaraciones a Europa Press que "en principio sí" pero que dependerá de cómo se desarrollen las obras en el colegio, situado en la avenida Alfonso XIII. "No hacen más que ponerles problemas y trabas", aseguró.
El colegio Sagrado Corazón recibió la semana pasada una orden de paralización de los trabajos de construcción por parte de la sección de Disciplina Urbanística del distrito de Chamartín al comprobar los servicios técnicos municipales que las obras "no se ajustan a las autorizadas en la licencia concedida".
PARALIZACIÓN DE OBRAS
La orden de paralización explica que durante la inspección realizada por técnicos municipales el pasado 8 de enero se comprobó que el vaciado de tierras en la parcela "alcanza cotas bajo rasante superiores a los 2 metros autorizados".
Además los estudiantes de Infantil no podrán empezar hoy las clases a falta de una licencia por parte de la Junta de Chamartín para el funcionamiento de las aulas prefabricadas en el centro educativo de la calle Santa Magdalena Sofía.
Los 400 estudiantes aproximadamente de Secundaria y Bachillerato llegaron hoy a las instalaciones de Aluche a las 8.00 horas en ocho autobuses. Es su primer día de colegio después de que parte del edificio de los Sagrados Corazones se derrumbara en Navidad.
