BILBAO, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Patxi López, hará caso omiso de "cantos de sirena, ofertas o anuncios de tregua" porque a ETA "sólo le queda desaparecer" y a la izquierda abertzale "romper amarras definitivamente" con la banda armada.
Estas declaraciones del máximo representante del Gobierno vasco se produce después de que ayer el representante de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, apostara por "periodos de distensión", mostrara su disposición a buscar "acuerdos", pero advirtiera de que ETA "tiene la última palabra sobre su actividad"
En una entrevista concedida a Onda Cero, recogida por Europa Press, López manifestó que "da igual que haya cantos de sirena, que haya ofertas o anuncios de tregua". "Hemos aprendido muchas lecciones y ya no es creíble. La única posibilidad que tiene ETA es desaparecer, y la única posibilidad que tiene el mundo que rodea a ETA es pedir a ETA que desaparezca o romper amarras definitivamente con ese mundo", añadió.
A su juicio, "nadie puede hacer política en este país y, en el fondo, es una tapadera de una banda terrorista para darle cobertura política, para buscarle financiación y buscarle respaldo social". "Y la sentencia del Tribunal de Estrasburgo es definitiva en este sentido", aseveró.
"CONTUNDENCIA" CONTRA ETA
Por ello, dijo que, "afortunadamente, la eficacia policial, la contundencia de la Justicia, la colaboración magnífica con Francia está dando buenos resultados, pero toca también a la parte de la política a jugar a ese papel de deslegitimación absoluta de su mundo".
"Porque no podemos permitir que todavía haya gente muy joven que se cree que, por coger una pistola y matar al que piensa diferente, se crea un héroe. Y eso forma parte de una deslegitimación total que tiene que haber en Euskadi desde los medios de comunicación públicos, desde los espacios públicos, desde la política y desde la educación", indicó.
En esta línea, se mostró convencido de que "eso impedirá el relevo en ETA, que, cuando se detenga a un terrorista no habrá otro para sustituirle porque no habrá nadie que piense que hay una patria oprimida que merece la pena ser defendida por las armas".
