Espera que el 'test de la verdad' al que se someterá el exdirigente de los GRAPO, Silva Sande, ayude a localizar el cuerpo de su marido
ZARAGOZA, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo aniversario del secuestro de Publio Cordón a manos de los GRAPO se cumple este viernes. "Han pasado diecinueve años, todos ellos muy duros y aún no se puede cerrar esa puerta, no ha aparecido su cuerpo", ha asegurado su viuda, Pilar Muro, en una entrevista concedida a Europa Press. "Para nosotros esto no ha acabado, seguimos secuestrados diecinueve años después".
Publio Cordón, presidente de Previasa y del Grupo Hospitalario Quirón, salió de su domicilio, en los alrededores del Canal Imperial de Zaragoza, para hacer 'footing', tal y como acostumbraba cada mañana antes de ir a al trabajo, pero ese día los GRAPO le capturaron. "Parece que pasó ayer", ha apuntado Pilar Muro. Desde el 27 de junio de 1995, la familia no ha podido dejar de lado el infinito dolor, la impotencia, la incertidumbre. "He tenido que acostumbrarme a la idea de que Publio estaba muerto".
"Son muchos años, a todos se nos han muerto familiares, tienes muchos recuerdos, pero puedes rezar, te viene a la cabeza cosas que ellos decían, pero esto es muy distinto. Te deja siempre una sensación muy triste, te preguntas ¿habré hecho todo lo que debería para salvarlo y para encontrarlo? Siempre te queda esa duda; esa incertidumbre te llena de angustia", ha dicho, precisando que este año la familia volverá a renirse, celebrará una misa y tratará de "seguir adelante todos".
Casi dos décadas después, el secuestro de Cordón carece de punto y final. Sí que ha habido, entre otras cosas, pistas falsas, declaraciones contradictorias de los GRAPO, detenciones de los terroristas que participaron en el secuestro y búsquedas infructuosas en Mont Ventoux, en la Provenza francesa. En esta zona, según declaró en 2009 el exdirigente de los GRAPO, Fernando Silva Sande, está enterrado al empresario, que falleció a consecuencia de una caída al intentar huir de la casa donde estaba retenido.
Dicha vivienda fue localizada en Lyon en julio de 2012. El empresario, que estuvo encerrado en un armario, a modo de zulo, pudo morir dos semanas después de ser capturado, mucho antes de que la familia Cordón pagara en vano un rescate de 400 millones de pesetas. El rehén iba marcando con palotes en el interior del armario sus días de encierro.
Pilar Muro ha dicho que no quiso ir a Lyon a ver la casa. "Pensé que me iba a causar todavía un mayor sufrimiento acercarme hasta allí, desesperarme imaginando las calamidades por las que tuvo que pasar Publio. Sí que he visto fotografías de la vivienda y del armario".
De las cartas que le envió su marido durante su cautiverio ha comentado que "no hubo manera de deducir pista alguna, contenían muchas tachaduras. Había alguna frase que a mí me parecía que podía decir algo, pero luego ha resultado que no. Escribió: 'Me siento muy cerca de vosotros'. Yo pensé entonces que no había salido de España y me equivoqué, lo tenían retenido en Francia".
"LA INCÓGNITA NO SE HA RESUELTO"
La viuda de Cordón ha explicado que "a estas alturas, sigues haciendo las cosas que tienes que hacer, no puedes abandonar, pero la incógnita no se ha resuelto, creo que continuaremos así toda la vida si no podemos llegar a saber la suerte que corrió Publio".
Pilar Muro ha apostillado que pone en duda la versión de Silva Sande porque a los GRAPO no les ha interesado nunca decir la verdad. "Si apareciera el cuerpo, entonces se demostraría que la banda no ha dicho ni una verdad ni media, que nos ha estado engañado a todos durante todos estos años", ha sostenido.
Ha agregado que "dijeron que lo habían soltado en Sarriá después de recibir el rescate, que le habían dado documentación falsa y que se había marchado del país. Esas mentiras no se sostenían. Eso lo dijeron ellos y la Policía también les creyó. Luego, lo último fue que Publio se había querido escapar, que en su intento se había caído desde una ventana, se mató y lo enterraron a unos 300 kilómetros de distancia".
Según ha argumentado, no tiene mucho sentido que Silva Sande recorriera unos 300 kilómetros con el cadáver de su marido en el maletero. "Es muy arriesgado, les pueden parar el coche, tener un accidente, mil cosas. Además a la zona del Mont Ventoux va mucha gente a hacer senderismo. Cavar en un bosque, en un terreno lleno de raíces, hacer un agujero grande para sepultar a una persona es muy complicado. No me creo que lo hayan enterrado así".
Además, ha recordado que "se ha peinado toda la zona del monte y no se hallado nada. Lo pudieron enterrar en los alrededores de la casa, que está bastante aislada, donde lo tuvieron encerrado, esto me encaja más, aunque pudieran ser conjeturas mías".
La presidenta del Grupo Hospitalario Quirón ha resaltado y agradecido "el enorme esfuerzo y la profesionalidad de la Guardia Civil, que no ha dejado de trabajar en el caso, que ha investigado todos los indicios".
"CONFÍO EN QUE EL TEST DE LA VERDAD APORTE ALGO"
El exdirigente de los GRAPO, Fernando Silva Sande, se ha prestado a realizar la prueba del Potencial Evocado Cognitivo P300 o 'test de la verdad', que el neurólogo y neurofisiológo José Ramón Valdizán llevará a cabo en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza.
"Confío en que arroje alguna luz, algún indicio fiable para poder encontrar el cuerpo de Publio; estoy contenta porque es un paso más, otra posibilidad para intentar saber dónde está", ha afirmado, recalcando que "es nuestro objetivo último".
A esta prueba denominada 'P300' ya se han sometido Miguel Carcaño, asesino de Marta del Castillo, y Antonio Losilla, presunto autor del asesinato de su esposa, desparecida en la localidad zaragozana de Ricla en abril de 2012.
"Supongo que hasta que no pase el verano no se va a hacer, requiere una preparación muy complicada y laboriosa. Tal vez esta vez aporte algo positivo", ha subrayado Pilar Muro. La prueba, que el equipo del doctor Valdizán llevará a cabo de forma "altruista", fue solicitada al juez de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez, quien admitió la práctica de la prueba si Silva Sande, que se encuentra en prisión, consentía en hacerla voluntariamente.
