MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, defendió hoy que los principales efectos negativos que está experimentando la familia tradicional no tienen su respuesta en las medidas que adoptado el Gobierno a lo largo de esta legislatura, como así le reprocharon los obispos el pasado domingo en Madrid, sino en los cambios de los hábitos de vida de la sociedad actual.
En declaraciones a Europa Press, Erkoreka se pronunció en estos términos respecto del aluvión de críticas que recibió el Ejecutivo el pasado domingo en la manifestación a favor de la familia que organizó la jerarquía de la Iglesia Católica en Madrid.
Según explicó, hay una serie de factores sociales, como el acceso de la mujer al mercado laboral, los horarios y el modo de trabajo establecidos o la gran competitividad existente en el mundo laboral, que están produciendo una alteración notable de la familia tradicional.
"Esos factores son los que están produciendo esos cambios, y no tanto una serie de medidas legislativas que lo que vienen es a responder a demandas muy puntuales que en sí mismas no impiden que quien quiera seguir viviendo una vida con arreglo al modelo de vida tradicional pueda seguir haciéndolo", sostuvo el portavoz de los nacionalistas vascos.
DEMANDA UN DEBATE ABIERTO.
Dicho esto, Erkoreka apeló a la necesidad de que se establezca un diálogo "en términos racionalidad y ponderación" entre la Iglesia, el Gobierno y los partidos políticos porque, en su opinión, sólo así se lograrán alcanzar consensos sobre una asunto que "se ha sacado de órbita".
"Que exista un debate abierto de cara a la sociedad para clarificar posturas puede resultar positivo y bueno --sostuvo el diputado vasco-- porque cuando se manipulan las posiciones contrarias y se hace demagogia no se contribuye ni a conformar las conciencias ni a crear una opinión pública ponderada y equilibrada".
