PNV verá "si hay posibilidad de jugar" para formar Gobierno y cree que el PP pondrá al PSE "al pie de los caballos"

Actualizado: jueves, 12 marzo 2009 14:39

Insiste en que contribuirá a "la estabilidad" del Gobierno del Estado, "después de un acuerdo de gobernabilidad" para Euskadi

BILBAO, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó hoy que su partido está dispuesto a analizar todavía "si hay posibilidad de jugar" para conformar el Gobierno vasco y consideró que el PP pondrá al PSE-EE "al pie de los caballos", en la actual situación de crisis económica de Euskadi, y "con un caramelo envenenado también en el Estado español".

Además, insistió en que la formación jeltzale contribuirá a "la estabilidad" del Gobierno del Estado, "después de un acuerdo de gobernabilidad" para Euskadi, que podría concretarse en un Gobierno de coalición o en un pacto de legislatura.

En una entrevista concedida a Radio Popular, recogida por Europa Press, Urkullu afirmó que, "a pesar de que parezca que hay muchos claros en las expectativas por los compromisos adquiridos previamente al 1 de marzo entre el PSE-EE y el PP, parece que todavía, desde luego, nosotros como PNV, vamos a ver si hay posibilidad de jugar".

Además, se dirigió al líder de los socialistas vascos, Patxi López, para preguntarle si "el punto de encuentro" que ha defendido en campaña electoral "es con el PP" porque ése "no es el punto de encuentro en un acuerdo entre diferentes y en esa transversalidad que tanto ha reivindicado el PSE-EE".

Preguntado por si la formación jeltzale tiene asumido que se irá a la oposición, replicó que "en absoluto". "En todo caso, será que nos echan o nos desplazan a la oposición, pero no nos vamos nosotros por voluntad propia porque, además, somos el partido ganador de las elecciones", añadió.

El líder jeltzale recordó, asimismo, que la voluntad de la sociedad vasca, favorable al "acuerdo entre sensibilidades ideológicas diferentes, nacionalistas y no nacionalistas", no es lo que "prima" en "la alianza entre el PSE y el PP".

"Nosotros queremos ofrecer a la sociedad vasca, no tanto la pelea por obtener la lehendakaritza, sino por hacer frente a la situación (de crisis) que le toca vivir, y con los proyectos de desarrollo, de progreso y de bienestar que ha ofrecido el PNV", apuntó.

Urkullu precisó que éste "es el propósito" en el que está su partido, y "no en el planteamiento" de irse a la oposición. "En todo caso, será que nos echan como consecuencia de ese pacto previo entre el PSOE-PP y del PSE-EE y el PP del País Vasco, quizá comprometidos con su propia palabra, empeñados en ella, sin pensar que los resultados electorales del 1 de marzo iban a ser los que han sido", dijo.

Sobre la posibilidad de que haya acuerdo entre socialistas y populares, manifestó que "el apoyo del PP al PSE-EE no será gratis" e irá más allá de "concederle sólo los votos para la investidura de Patxi López".

El líder jeltzale manifestó que "un apoyo del PP a PSE sería un ejercicio de estrategia política de dejar al Partido Socialista al pie de los caballos en la situación en la que vivimos y con un caramelo envenenado también para el Estado español, en orden a lo que han sido los resultados en Galicia, con la perspectiva de las elecciones europeas y con la situación de soledad en la que pueda estar Rodríguez Zapatero". "Puede ser una estrategia del PP del País Vasco y también del PP español", apuntó.

También consideró que, siguiendo la tesis de que "en política no hay nada gratis", habrá "prebendas que se tengan que pagar por parte del PSE-EE". "Es evidente que la institución foral alavesa ha salido a la palestra, como el caso de Getxo o la Mesa del Parlamento vasco, y determinados Departamentos del Gobierno vasco. El PP planteó en campaña electoral una condición al PSE-EE que era tres Departamento con nombres y apellidos", añadió, en alusión a los de Interior, Educación y Cultura.

LAS INSTITUCIONES DEL ESTADO

Iñigo Urkullu afirmó que su ofrecimiento a los socialistas "tenía como objetivo afrontar la situación de desempleo, la lucha contra el paro, la situación de crisis que nos está afectando y nos va a afectar todavía más, profundizar en el autogobierno" y que comprendía un punto, que sigue vigente, "el de la corresponsabilidad en la estabilidad del Gobierno de las instituciones emanadas de las Cortes Generales del Estado".

Según apuntó, "la situación que vive Euskadi la vive más gravemente la sociedad española", e indicó que su partido está dispuesto a dar su apoyo para afrontarla, "después de un acuerdo de gobernabilidad que bien puede tener un formulación de Gobierno de coalición en Euskadi o bien de un pacto de legislatura" que permita "un Gobierno fuerte y estable".

Preguntado sobre si la actitud ayer del portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, respecto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante la sesión de control al Ejecutivo, supone "el inicio de una ruptura", Urkullu afirmó que "no es ninguna ruptura", ni su política "va a ser la del revanchismo, como es la del PSE-EE, un revanchismo mal entendido respecto a una interpretación de lo que fue la política hace ahora 11 años" derivada de la Declaración de Lizarra-Garazi, "con un planteamiento de acumulación de fuerzas nacionalistas".

Según aseguró, "lo de ayer no es un revanchismo y, además, no es ninguna ruptura" porque su partido "no tiene ningún compromiso con el PSOE".

En este sentido, rechazó que se niegue ahora "el encuentro entre nacionalistas y constitucionalistas" y recordó que la formación jeltzale ha respaldado los Presupuestos Generales del Estado "y han sido bien recibidos por el PSOE". "¿Era válido entonces el encuentro entre nacionalistas y constitucionalistas y ahora no lo es?. Creo que se está jugando con la interpretación cabal de la sociedad vasca y se está escondiendo una dinámica del 'quítate tú para ponerme yo'", indicó.

En cuanto a la política que PNV realice en Madrid, afirmó que no hay ningún compromiso que les "ate", y actuará "en función de las circunstancias que nos afecten como partido en cada momento también".

En este sentido, dijo que ofrece "una fórmula de Gobierno estable, fuerte, desde el ejercicio de la serenidad absoluta". "Estaremos, en todo caso, donde nos corresponda estar, pero, hoy por hoy, estamos en la reflexión de aspirar a tener lehendakari y poder conformar un Gobierno fuerte y estable", apuntó.

Además, negó que "el cambio del candidato" del PNV haya estado "encima de la mesa" en las conversaciones que ha mantenido la formación jeltzale. "Fue la interlocución del PSE-EE quien, sin venir a cuento y cerrándose las puertas de manera peligrosa, no para el presente, sino para el futuro de las relaciones con el PNV, dijo que 'si habéis interpretado que esto pueda ser una cuestión de Ibarretxe sí o Ibarretxe no, no os llevéis a engaño'", aseveró.

CONVERSACIONES

En esta línea, afirmó que él no lanza "infundios sin más" cuando ha hablado de posibles contactos entre el PSE y Batasuna. "Son bastante insistentes los rumores de las relaciones que puedan existir entre el PSE-EE y Batasuna y esto, si es un infundio, tal como el presidente del Gobierno español dice que es, pues de infundios anteriores también está llena la realidad anterior en la relación entre el PSOE y de Batasuna", añadió.

El presidente del EBB dijo, "con honestidad y absoluta tranquilidad", que "es bueno que hablen". "Si nosotros pudiéramos, hablaríamos", afirmó.

Además, apuntó que, "con el tiempo, habrá que hacer una lectura de si aquí ha habido una pinza de confluencia de objetivos entre PSE, PP y la autodenominada izquierda abertzale oficial de desalojar al PNV de las instituciones por intereses diferentes".

Además, señaló que la ausencia de una sensibilidad ideológica en el Parlamento será "otra cuestión que habrá que trabajar en el futuro" porque habrá "aspectos que afectan a la convivencia normalizada en la política vasca" que se tendrán que dar fuera de la Cámara.