SANTIAGO DE COMPOSTELA, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
El PP necesitaría en torno a 25.000 votos procedentes de emigrantes pontevedreses para arrebatarle al BNG su escaño por la provincia, la única en la que existe una mínima posibilidad de que varíe el reparto de diputados en Galicia con la inclusión de los votos procedentes de los residentes ausentes, aunque todas las formaciones coincidieron en que es "prácticamente imposible".
De hecho, nada cambiará si se repiten entre los emigrantes los resultados de hace cuatro años, cuando el PP logro 52.915 votos, frente a los 30.250 del PSOE y los 3.284 del BNG. Concretamente en Pontevedra, los populares tuvieron 17.327 apoyos, por lo que para lograr el escaño que corresponde hasta el momento a la nacionalista Olaia Fernández Davila tendrían que alcanzar 7.000 más y que el BNG no subiese los 987 sufragios que tuvo.
"Aunque la participación fuese mayor, es prácticamente imposible que se produzca", destacó en declaraciones a Europa Press el secretario de organización del BNG, Alberte Ansede, que incluso consideró que es probable que se inviertan los resultados alcanzados por populares y socialistas en 2004, ya que el voto emigrante suele respaldar mayoritariamente al partido que está en el Gobierno.
En esa misma línea, el secretario xeral del PSdeG y presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, concluyó hoy en una rueda de prensa que el recuento del voto de los residentes ausentes no variará sustancialmente el resultado de las elecciones, aunque sí esperó que el incremento del apoyo obtenido por el PSOE en Galicia "sea mejorado claramente después del voto emigrante".
Por su parte, fuentes populares consultadas por Europa Press también coincidieron en que el voto procedente del Censo Electoral de Residentes Ausentes no cambiará el reparto de diputados, aunque consideraron que contribuirá a elevar el porcentaje de voto del PP más allá del 45 por ciento.
