Advierte del "riesgo de colapso" del sistema sanitario si no se aplican medidas de racionalización del gasto
BALAGUER (LLEIDA), 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PP a la Presidencia de la Generalitat, Josep Piqué, prometió hoy reducir a tres meses la espera para operaciones quirúrgicas en los hospitales públicos y concertados de Cataluña, pese a que "pueda parecer exagerado", ya que los gobiernos de CiU y el tripartito "no lo han podido conseguir", aunque se fijaron un tiempo máximo de garantía de seis meses.
Tras una reunión que mantuvo con los responsables de la patronal Unión Catalana de Hospitales (UCH), que gestiona la mayoría de hospitales concertados de Cataluña, Piqué aprovechó para presentar las propuestas del programa del PP en el ámbito sanitario, centradas en impulsar medidas que "aporten sostenibilidad" al sistema.
Piqué se comprometió a garantizar un máximo de tres meses de espera para "poder operarse de las intervenciones quirúrgicas más importantes", que ahora "cuentan con 12 meses de espera". Actualmente, las principales operaciones quirúrgicas cuentan con un tiempo máximo de garantía de seis meses en Cataluña.
"Puede parecer muy exagerado" pero "en la Comunidad de Madrid, gobernada por el PP, se ha conseguido un tiempo máximo de espera de dos meses", por lo que "en Cataluña, también se puede lograr", según el dirigente popular, quien censuró que "una persona que ya sabe que tiene y que ya ha recibido el diagnóstico tenga que esperar 12 meses para entrar a quirófano".
Piqué advirtió del riesgo de "colapso" del sistema sanitario de "no aplicarse medidas de racionalización" del gasto sanitario y destacó que, en pocos años, Cataluña "ha pasado de tener 6 millones de tarjetas sanitarias" a "tener 7,2 millones de usuarios de la sanidad", especialmente por "la llegada de inmigrantes".
El dirigente del PP catalán apostó por "controlar la excesiva burocratización del sistema sanitario y modernizar la estructura del Instituto Catalán de la Salud (ICS)", que gestiona los hospitales y ambulatorios de la Generalitat, así como "optar por realizar compras centralizadas de material sanitario y no como ahora, que lo hace cada centro sanitario".
En cualquier caso, descartó "imponer tasas a los ciudadanos para financiar la sanidad", algo "muy propio de los socialistas", señaló, en clara alusión al gravamen de la gasolina impuesto por el tripartito catalán para sufragar la deuda sanitaria. "El camino para mejorar la financiación de la sanidad es el de buscar una mejor eficiencia de los recursos económicos", apuntó.
Otras propuestas del PP son garantizar la elección de centro por parte de los usuarios, ofrecer una segunda opinión médica para las enfermedades más graves, así como desgravar las primera de seguros médicos hasta el 45% de su importe, para dar "continuidad al sistema de mutualismo de Cataluña", que cuenta con "una gran tradición"
