Recomienda que mejoren las cualificaciones de sus empleados y fomenten su creatividad
MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Príncipe de Asturias ha pedido hoy a los directivos y ejecutivos españoles que vendan la marca país cuando salgan al extranjero y presenten su condición de españoles como una ventaja que les diferencia de otros competidores.
Así se ha expresado en la clausura del encuentro anual de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE), celebrada en el Palacio de Congresos de Madrid, donde ha reconocido que la Marca España, junto con la innovación avanzada, "han desempeñado un papel discreto" hasta la fecha en la elección por parte de nuestros directivos de las ventajas que les distinguen frente a competidores extranjeros.
"Hasta ahora las empresas españolas han basado sus ventajas competitivas en sus capacidades de gestión, en las habilidades organizativas y gerenciales, en su ejecución de proyectos y en la eficaz gestión del talento", ha señalado el Príncipe, que ha animado a las compañías a "potenciar" también factores como la Marca España y la innovación avanzada "ya que ello puede contribuir a consolidar y ampliar la presencia española en el exterior y a que cada día se internacionalicen" las empresas españolas.
Tras insistir en que el futuro de la economía española "habrá de conquistarse con la mira puesta más allá" de nuestras fronteras, ha alentado a los empresarios a abrirse a "mercados todavía sin explorar".
Y también les ha recomendado que mejoren su capacidad de gestionar equipos, de "motivar e ilusionar" a sus empleados y sitúen a sus colaboradores "cada vez más en el centro" de sus estrategias empresariales, pues "aún en una era marcada por la tecnología, las personas siguen siendo el factor más decisivo".
Sólo así, "contando con el concurso y creatividad" de los empleados, las empresas lograrán fortalecer sus estrategias, ha advertido el Heredero de la Corona, que ha subrayado la importancia de que los directivos de las compañías "mejoren" las cualificaciones, la "empleabilidad" y la disposición de sus trabajadores para el "cambio permanente".
"Todo ello hace que la acción directiva tenga que seguir cimentándose en la tenacidad y el ejemplo, con la sobriedad y la autoexigencia que requieren los tiempos actuales", ha destacado.
El presidente de CEDE y Caixa Bank, Isidro Fainé, ha coincidido con el Príncipe en señalar que en estos momentos de crisis es hora de "subrayar las fortalezas" de nuestras empresas, pero también las de España como país, porque no podemos pedir a los inversores extranjeros que confíen en nosotros si somos "los primeros en dudar" de nosotros mismos.
Entre las ventajas comparativas que presenta España, se ha referido a la "credibilidad" del sector exportador; nuestra situación geográfica y nuestro posicionamiento en sectores de "tecnología media-alta".
Y ha urgido a culminar la reestructuración bancaria, reducir el déficit público y mejorar la comunicación en los procesos de reforma.
En el acto de clausura también ha participado el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, quien ha reiterado que el "debate institucional" que se está produciendo en España incitado por las aspiraciones independentistas de nacionalistas catalanes y vascos no ayuda a la labor del Gobierno español de hacer frente a la crisis ni a la imagen del país.
