BILBAO, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor, afirmó hoy que el Plan Ibarretxe está "muerto y enterrado, y salvo que se pretenda resucitar cadáveres, no tiene ningún sentido que se quiera sacar a la luz un proyecto que sólo contribuyó a fomentar la división y a crear inseguridad e intranquilidad en la sociedad vasca".
En declaraciones a Europa Press, Pastor respondió así a las manifestaciones del presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, en las que afirmaba que se podría "recuperar" el nuevo Estatuto Político aprobado por el Parlamento vasco en 2004, porque contiene "muchos principios" que sirven para "saber cómo deberíamos entender el actual autogobierno en busca de un acuerdo".
Para el dirigente socialista vasco, éste es es "uno más de los bandazos" que da ultimamente Urkullu. "Es una apuesta trasnochada y fuera de tiempo. El plan Ibarretxe se puso en circulación y terminó su recorrido en el Congreso de los Diputados. Allí se rechazó y, por lo tanto, carpetazo al asunto", destacó.
En este sentido, indicó que reivindicar de nuevo el Plan Ibarretxe "justo ahora que vivimos tiempos de tranquilidad, de normalidad y de una política de acuerdos transversales, es ir a contracorriente de la sociedad vasca, es situarse fuera del tiempo y es una muestra más de los problemas políticos que tiene el PNV".
Según afirmó Pastor, el PNV "es incapaz de encontar su sitio, da un pasito para adelante y dos para atrás. Un día da un bandazo hacia el radicalismo y al otro da otra vuelta de tuerca hacia la racionalidad".
A su juicio, Iñigo Urkullu pretende contentar a "tibios y troyanos" dentro del partido y "eso no es la forma de dirigir un partido politico serio". "Eso da la imagen de un partido errático y sin rumbo", concluyó.
